barcelona - Junts per Catalunya (JxCat) y ERC encaran la recta final de la negociación para formar Govern con la sensación de que Carles Puigdemont parece estar dispuesto a hacerse a un lado y gozar de un papel propio desde su exilio en Bruselas. Fue el portavoz de los republicanos, Sergi Sabrià, quien certificó que las conversaciones “van bien” y que confían en que el acuerdo sea “inminente”, antes de que acabe la presente semana, si bien aún restan flecos por dar carpetazo en cuanto a la organización del Ejecutivo y su hoja de ruta. Un pacto donde aseguró que “no se está hablando de nombres” como elemento central y que también se estaría cuadrando con la CUP, sobre todo en lo referente a los pasos a seguir en defensa de la república catalana. Sin embargo, ayer por la noche algunas informaciones apuntaban al encarcelado Jordi Sánchez como el candidato de consenso de ambas formaciones para presidir la Generalitat. Si se confirma esta opción, complicaría las intenciones de ERC de tener un gobierno efectivo cuanto antes, ya que la situación de reclusión penitenciaria del que fuera líder de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) le invalida porque puede ser inhabilitado por el juez.
ERC confía en que la fumata blanca llegue antes de que se celebre el pleno del Parlament este jueves, donde se debatirá la propuesta de resolución que presentó Junts per Cat para reconocer a Carles Puigdemont como president “legítimo” de la Generalitat. La formación liderada por el encarcelado Oriol Junqueras quiere sellar la rúbrica antes de dicha fecha, pues llevan semanas exigiendo una entente global que tiene que incluir una investidura, un Govern efectivo, la estructura de Govern y un plan de legislatura. “Las conversaciones” con JxCat para hallar una fórmula que “legitime la figura de Carles Puigdemont y al mismo tiempo dote a Catalunya de un Ejecutivo efectivo marchan muy bien”, reiteró Sabrià ya que sería “bueno llegar al pleno con todo cerrado” para que los republicanos apoyaran la proposición en apoyo a quien fuera Jefe del Govern ante de la aplicación del artículo 155 de la Constitución. “Hay que ponerse de acuerdo para compartir la hoja de ruta y decidir hacia dónde vamos”, precisó el portavoz de ERC, quien se mostró partidario de dialogar con los comunes y de reunirse con ellos “las veces que haga falta”.
Por lo que respecta a los nombres que ocuparán los principales cargos del nuevo Govern, Sabriá no entró en detalles pero sí que indicó, refiriéndose al exvicepresident y los exconsellers, que “los que se la jugaron tienen que ver reconocido su papel, no pueden quedar excluidos de la vida política” y precisó que no pueden quedar excluidos por estar sometidos a procesos judiciales y merecen un cargo aunque solamente sea permaneciendo como diputados.
Por su parte, Ciutadans presentará una propuesta de resolución en el Parlament que “deje claro” que Puigdemont no puede volver a ser president mientras esté huido en Bélgica. “Parece que nadie se atreve a decir a Puigdemont que está desnudo y a ver si Parlament lo vota”, explicó el secretario general de la fuerza naranja, José Manuel Villegas, insistiendo en la necesidad de que el president de la Cámara catalana, Roger Torrent, tenga “valor” para presentar un candidato “que no esté huido ni en la cárcel”. “Lo fundamental era abrir nuevamente el Parlament, que se hiciera un debate con luz y taquígrafos, lejos reuniones oscuras”, recalcó.
