2 Igor Santamaría

Barcelona ? El PP no parece dispuesto a levantar la aplicación del artículo 155 de la Constitución que tiene a Catalunya, en la práctica, intervenida. De hecho, desde el partido liderado por Mariano Rajoy y, según su líder catalán Xavier García Albiol, apuestan por “alargar y profundizar” su empleo en el supuesto de que se invista a un president de la Generalitat que se halle investigado, en prisión provisional, en libertad condicional o en el extranjero, aunque el dirigente de la sucursal catalana matizó que es una idea personal que no alcanza a los órganos de gobierno de Madrid. Algo que invalidaría todas las opciones que se barajan, desde Carles Puigdemont a Oriol Junqueras, pasando por Jordi Sànchez, Jordi Turull o la misma Elsa Artadi. Desde Génova no se aprecia ni un atisbo de desengrasar la situación con algún guiño. Todo lo contrario. La defensa del 155 de Albiol, que apenas arañó cuatro escaños en las urnas sellando unos resultados desastrosos para su filial popular, alude al caso de que se escoja a una “persona en prisión, imputada o huida”, en alusión a las negociaciones entre JxCat y ERC, aún por dilucidarse.

“Si no hay un Govern lo más normal posible, sería partidario de que el 155 se mantuviera en el tiempo hasta que haya esa normalidad. Pero es mejor no hacer caso a tantos nombres para no acabar desquiciado: lo mejor es no caer en su trampa para distraer al personal con peleas internas”, se despachó Albiol, que ve lógica la ampliación de su aplicación por el “clima esperpéntico” gestado en Catalunya. Frente a los “globos sonda y peleas internas” de las fuerzas rupturistas, que “se están tirando los platos a la cabeza”, el líder del PP catalán reclamó que “dejen de pelearse públicamente y se pongan de acuerdo”.

En las últimas horas JxCat y ERC prosiguen sus contactos para la investidura con la situación algo enconada dadas las atribuciones que Puigdemont desea mantener desde Bélgica, ante lo que los republicanos plantearon la intención de que sea Junqueras quien presida la Generalitat desde prisión. La postura de ERC tiene a los antiguos convergentes en actitud “inquieta y perpleja” porque no dan trascendencia al reparto de cargos y sí a culminar la hoja de ruta para formar un nuevo gabinete y la apuesta por la república, observando en los republicanos “renuncias” incomprensibles. Es por ello que desde JxCat sigan sin descartar incluso la repetición de elecciones, pero no se encuentra entre sus prioridades pese a que los sondeos digan que volverían a salir beneficiados en el reparto de escaños dentro del mundo soberanista.

primero turull; luego artadi A priori, el asunto estaría resuelto en diez días, y pasaría por que Puigdemont diera “un paso al lado” manteniendo poderes ejecutivos y medite si le conviene apostar por un sustituto con procesos judiciales abiertos, como Jordi Sànchez o Jordi Turull, nombre este último que toma más cuerpo en última instancia al estar fuera de prisión y quien sería president durante unos meses hasta su eventual procesamiento, momento en que emergería la figura de Elsa Artadi. La investidura de un candidato alternativo al líder del JxCat permitiría no abrir un nuevo contencioso judicial con el Estado. ERC reivindica que, si Puigdemont mantiene poderes ejecutivos en Bélgica como nombrar a los consellers y convocar comicios, la “lógica” es que Junqueras debería tener un papel preponderante en el Ejecutivo que se formaría en Catalunya. Sostienen que, si lo que se busca es restituir lo máximo que sea posible al Govern que fue cesado, Junqueras era el vicepresident de aquel Gabinete y merecería, pese a estar en la cárcel actualmente, ser la figura más importante en Catalunya si Puigdemont sigue en Bruselas refugiado. Por ello, los republicanos recuerdan que Junqueras tenía mayor rango que Turull, que era conseller, y que Sànchez y Artadi, que ni siquiera estaban en ese Ejecutivo catalán.

En la práctica las dos formaciones tienen muchos obstáculos para dar un rol ejecutivo a sus respectivos candidatos, a Puigdemont porque está en Bruselas y pesa contra él una orden de detención en España, y Junqueras porque está en la cárcel, y cualquier movimiento debería autorizarlo el juez. Paralelamente, los letrados de la Cámara tienen el encargo de elaborar un informe sobre si la reforma de la ley que persigue JxCat para investir a Puigdemont a distancia es compatible con el auto del Constitucional que pone condiciones a la investidura.

En este escenario, el popular Albiol señaló sobre la posibilidad de que se convoque un pleno del Parlament para los próximos días ?se abordará hoy en la Mesa y la Junta de Portavoces? que “no habrá más remedio que aceptar ‘pulpo’ como animal de compañía”. Por último, al preguntársele por el informe de Amnistía Internacional que indica que se empleó fuerza excesiva contra los votantes del 1-O, mostró su “discrepancia total y absoluta”. l