Vitoria - El PP de la CAV expresó ayer su rechazo a reformar el Estatuto de Gernika por el escenario de incertidumbre y riesgo para la recuperación económica que supondría, y porque provocaría a su juicio una fractura entre los vascos. Así lo expuso el portavoz popular en el Parlamento Vasco, Borja Sémper, quien, pese a la oposición de su partido a tocar el Estatuto, presentó un documento en la Ponencia de Autogobierno en el que reclama que se rechace “de manera expresa y rotunda” el derecho de autodeterminación.
El texto presentado por el partido de Alfonso Alonso advierte contra “la voluntad de varios grupos de incorporar el derecho de autodeterminación en un hipotético texto articulado” y señala diversos riesgos de esta forma de proceder: “Aventurar una reforma del Estatuto que altere el régimen foral del Concierto Económico o pretenda el vaciamiento de competencias de las Juntas Generales nos llevaría a un escenario de incertidumbre e inseguridad jurídica y colisionaría con las previsiones constitucionales, además de abrir una fractura institucional, política y territorial entre los vascos”, asevera.
Los populares vascos agregan que Euskadi “goza de una situación de estabilidad política” y abrir “un escenario de incertidumbre pondría en riesgo la recuperación económica”. Ponen como ejemplo “la deriva política que ha arrastrado a Catalunya a su peor crisis institucional”, lo que debe “servir de advertencia en el País Vasco”. “Abrir un proceso soberanista al amparo de una reforma estatutaria, invocando el derecho de autodeterminación, volvería a dividir a la sociedad vasca y a perturbar la convivencia, y acarrearía consecuencias muy negativas en materia económica”, señalan.
En contraposición a este escenario, defienden que la Constitución y el Estatuto “salvaguardan y potencian nuestro Concierto Económico, principal herramienta financiera para gestionar mejor los recursos públicos y, en definitiva, los espacios jurídicos que garantizan nuestras libertades, nuestro desarrollo y nuestra convivencia”, por lo que reivindican su “vigencia”.
Línea roja Por todo lo anterior, el PP vasco emplaza a “renunciar a vías unilaterales” y a “no traspasar la línea roja que supone la incorporación del derecho de autodeterminación a ese nuevo estatus jurídico y político, y alejar de manera inequívoca el fantasma de proyectos rupturistas”, cuyas consecuencias se han visto, insiste, en Catalunya.
Sí reivindica, en cambio, abrir el debate para modificar algunas de las leyes del bloque estatutario, y así plantea reformar la Ley de Aportaciones o la Ley de Territorios Históricos (LTH) “para fortalecer el papel institucional y político de Diputaciones Forales y entes locales”. - C.C.B.
