Pamplona - La crisis interna que vive Podemos Navarra desde que el viernes pasado la dirección del partido anunciase que tiene la intención de expulsar a la parlamentaria y exsecretaria general, Laura Pérez, vivió ayer un punto de inflexión. A media mañana de ayer, cuatro de los siete parlamentarios que tiene Podemos en Nafarroa comparecieron ante decenas de medios de comunicación para exigir directamente a la ejecutiva del partido que retire el expediente que tiene abierto contra Laura Pérez; haga una reflexión generalizada de las graves consecuencias que puede tener enquistar esta situación; y valore si no merece más la pena tratar de poner en valor los logros conseguidos por el partido -“como haber sido pieza fundamental en el cambio político en Navarra o formar parte de un proyecto ilusionante”, especificó Carlos Couso, ayer portavoz del grupo- frente a “las suciedades que de una manera tan absurda han trascendido, tapando el buen trabajo que se está haciendo en las instituciones y proyectando una mala imagen en la opinión pública”.
El grupo parlamentario, a cambio, se ofreció a tender la mano a la dirección y trabajar conjuntamente, “algo que ha dado buenos resultados”, insistió Couso. Pero deliberadamente, el portavoz del grupo fue ambiguo en qué ocurriría si la dirección no accediese a retirar el expediente: “No nos gustaría abandonar Podemos, pero no lo descartamos. Si no se recoge esta mano tendida, lo valoraremos, pero creemos que se impondrá la cordura en todas las partes y volveremos al buen camino”.
Comparecieron Laura Pérez, Carlos Couso, Fanny Carrillo y Rubén Velasco, el sector más afín a le exsecretaria general. Pero la foto todavía pudo ser más potente, ya que finalmente Tere Sáez, que firmaba la convocatoria de la rueda de prensa, no pudo asistir por estar en una comisión en el Parlamento. En cualquier caso, seguirán comprometidos con el cambio y el cuatripartito del Gobierno de Barkos. - A.I.