barcelona - El Ayuntamiento de Barcelona colgó ayer un lazo amarillo en la fachada de las dependencias municipales de la plaza Sant Jaume para reclamar la libertad de Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart y en apoyo a sus amigos y familiares. El Consistorio gobernado por Ada Colau (Barcelona En Comú) informó en una nota de que este gesto busca “expresar su rechazo a la decisión de mantener en prisión preventiva a cargos electos y representantes de dos de las entidades más importantes del país que siempre han actuado de manera pacífica”.
Desde que Junqueras, Forn, Sànchez y Cuixart fueron encarcelados, la administración local barcelonesa “ha exigido su puesta en libertad en múltiples ocasiones”, según recordaron, si bien en una ocasión se toparon con una orden de la Junta Electoral Central. Fue el caso del pasado 2 de noviembre, cuando el organismo electoral, conformado por ocho magistrados del Tribunal Supremo y cinco catedráticos de derecho y que vela por la transparencia y objetividad de los procesos electorales, ordenó la retirada de una pancarta colocada en la fachada del edificio consistorial en plena campaña del 21 de diciembre. La imagen fue retirada.
Ese mismo día, y como respuesta a la eliminación de la citada pancarta, la alcaldesa barcelonesa pronunció una declaración institucional para reclamar la inmediata liberación de los presos. El 3 de noviembre, por su parte, se celebró un pleno extraordinario del que salió un documento consensuado por parte de Barcelona en Comú, PDeCAT, ERC y CUP exigiendo la libertad de los presos. PSC, Ciudadanos y PP optaron por no suscribirlo. Esta última formación censuró ayer la colocación de un lazo amarillo que, según el presidente del grupo popular municipal Alberto Fernández, es un gesto que confirma que Colau “sigue la estela de los estelados y es la cooperadora necesaria del independentismo. Debería ser la alcaldesa de todos los barceloneses y no solo de los independentistas”. - Efe