Barcelona - Elisenda Alamany, número dos en la lista de Catalunya en Comú-Podem (CatComû-Podem), denominados como comuns, exigió ayer a ERC que deje claro si quiere ser un referente de la izquierda catalana o si quiere continuar siendo “la muleta de la antigua CDC”. En una entrevista de Europa Press, Alamany recordó que ellos solo llegarían un acuerdo con aquellos partidos que tengan en su programa “el derecho a decidir y la agenda social”, por lo que reclamó a los republicanos que definan su posición.

Alamany respondía de este modo a la carta que el líder de ERC, Oriol Junqueras, envió el jueves a los militantes del partido republicano desde la cárcel madrileña de Estremera, en la que alentó a “tejer complicidades” con los ‘comuns’ porque, “antes que independentistas somos demócratas”.

A juicio de la candidata de los comuns, en los últimos tiempos los republicanos han ayudado a que se impongan las tesis del PDeCAT y criticó que ahora incluyan en sus listas a miembros de Demòcrates --la escisión independentista de los democristianos de Unió-. La candidata por Barcelona se refería también a la decisión que los republicanos tomaron en julio de 2015 de ir en lista conjunta con miembros de CDC e independientes para formar JxSí, una candidatura que antepuso la hoja de ruta independentista concurriendo a las elecciones entendiéndolas como un plebiscito de la independencia, a su juicio.

Para Alamany, durante la última legislatura no se ha tenido en cuenta la mejora de la educación pública, ni de la sanidad pública ni se han subido impuestos a los que más tienen, ni se ha modificado el impuesto de sucesiones: “Yo creo que si a alguien se le pregunta que, tras estos 18 meses, vive mejor, si sus condiciones de vida han mejorado, estaríamos de acuerdo en decir que eso no ha sucedido”. “Por lo tanto, le toca a ERC también decir si quiere ser un referente de la izquierda o si simplemente quiere perpetuar la hegemonía convergente”, incidió la portavoz del partido, que recordó que su lista representa la tradición catalanista con la vertiente social de los comuns.

Por otro lado, Alamany criticó que el PSC haya incluido en sus listas en un puesto simbólico al vicepresidente de Societat Civil Catalana, Alex Ramos: “Pasamos de un partido socialista que había defendido la educación pública catalana a un partido socialista de la mano de los que la impugnan”. Por ello, la dirigente de CatComú defendió la decisión de los comuns de Barcelona de romper el pacto en el Ayuntamiento con los socialistas, después de consensuarlo con sus bases en una consulta interna. “Ante esta política de bloques y de mezcla entre derecha e izquierda se ha demostrado que el Ayuntamiento de Barcelona es una institución de estabilidad”, zanjó. -E. Press