MADRID. Según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado, la joven formaba parte de una red de individuos afines al grupo terrorista Estado Islámico (EI o DAESH) y sus actividades fueron detectadas por los servicios de información e inteligencia internacionales desde hace dos años.

A semejanza de otros modelos de radicalización, el tránsito de la joven hacia el extremismo se había consolidado en los dos últimos años, combinado, por un lado, con un modelo autodidacta mediante el consumo de propaganda yihadista y, por otro, con la intervención a través de redes sociales de otras personas --mujeres principalmente-- que contribuyeron de forma decisiva a la concreción del ideario yihadista.

Este proceso de radicalización le llevó paulatinamente a sucumbir a las más severas exigencias del rigor salafista, tanto en lo referido a la utilización del código de vestimenta estricto como en el progresivo aislamiento de su actividad pública hasta el punto de ser inusual.

Las detenciones de varias de las personas con las que se relacionaba, hicieron que paulatinamente su actividad se fuera rodeando de nuevas medidas de seguridad que impedían realizar el completo seguimiento de sus acciones, señala el departamento dirigido por Juan Ignacio Zoido.

Respecto al autoadoctrinamiento de la detenida, la investigación ha revelado que los grupos cerrados a los que pertenecía dedicaban la mayor parte de su actividad a manipular las voluntades de las usuarias con objeto de que se materializara su desplazamiento a zona de conflicto. Esto no solo lo hacían bajo la difusión de una propaganda llamativa en lo positivo de la vida en esa región, sino que introducían elementos de gran contenido violento, destacando continuos videos y referencias a todo tipo de ejecuciones y acciones bélicas.

La Guardia Civil está registrando el domicilio de la detenida para recabar las evidencias que permitan determinar su grado de implicación en las actividades de los grupos terroristas a los que apoya, así como sus posibles vínculos tanto en España como a nivel internacional.

COLABORACIÓN DEL FBI

La colaboración del FBI estadounidense ha resultado fundamental en la identificación de las conductas delictivas de la joven detenida este martes en Palamós (Girona). Tras el trabajo de los investigadores de la Guardia Civil y del FBI, se determinó la existencia de otros individuos cuyas conductas fueron objeto de intervención judicial, y que motivó la ejecución de más detenciones.

En este sentido, el pasado mes de junio de 2016, fruto de la referida colaboración con autoridades estadounidenses, fue detenido un individuo en Estados Unidos con el que la detenida mantenía una estrecha vinculación. Su arresto permitió abortar el proyecto de desplazamiento a Siria de ambos.

206 YIHADISTAS DETENIDOS

Esta operación se ha desarrollado bajo la dirección del Juzgado Central Instrucción número 1 y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

Desde el 26 de junio de 2015, fecha en el que el Ministerio del Interior elevó a cuatro el nivel de alerta antiterrorista, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 206 terroristas yihadistas en operaciones realizadas en España y en el exterior y a un total de 249 desde principios de 2015.