BARCELONA. JxSí y la CUP han utilizado su mayoría absoluta para "dejar en suspenso" el pleno que, según el calendario ordinario de sesiones, debía celebrarse este miércoles y jueves, fecha esta última que coincide con el segundo plazo marcado por el Gobierno para que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, aclare si ha sido declarada la independencia de Cataluña o no.
Los grupos de la oposición han lamentado esta decisión y han denunciado que ya son seis las semanas en las que no ha habido pleno ordinario con sesión de control al Govern, lo que constituye "una irregularidad" y una posible vulneración de los derechos de los diputados.
El próximo lunes se reunirá de nuevo la Junta de Portavoces para prever la posibilidad de que haya finalmente un pleno los días 25 y 26 de octubre, pero primero tendrá que haber un acuerdo sobre el tipo se sesión plenaria que se realiza, puesto que hay grupos que desean que sea ordinario, otros monográfico y otros el correspondiente al Debate de Política General.
La CUP, que precisamente había pedido un pleno monográfico para esta misma semana a fin de llevar a cabo una declaración "formal y solemne" de independencia por parte del Parlament, esta tarde ha desistido en su solicitud y ha votado junto a JxSí que finalmente no se celebre.
Los dos grupos independentistas han esgrimido como argumentos para dejar "en suspenso" el pleno de esta semana el "carácter excepcional de la situación política que vive Cataluña" después del 1 de octubre, y también que "todo el país está a la expectativa de que el Gobierno central pueda activar el artículo 155 de la Constitución".