MADRID - El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, explicó ayer que no descarta la creación de una “pasarela profesional” para que los agentes de los Mossos d’Esquadra descontentos en el cuerpo puedan pasar a trabajar en la Policía Nacional o Guardia Civil. Aunque Zoido dijo que dicho mecanismo “no es una prioridad” en la actualidad, precisó que, llegado el momento, estarían dispuestos a estudiarlo.
En un contexto de desconfianza entre las fuerzas de seguridad del Estado y la policía catalana tras las discrepancias ocurridas el 1-O, se debate la opción de que los agentes de los Mossos en desacuerdo con sus mandos pudieran pasar a los cuerpos españoles. Así, el titular de Interior recordó que la “pasarela” es una posibilidad prevista en la ley y, “en su momento, si es necesario”, se hablará y se barajará la posibilidad de “dar esta salida” a los mossos descontentos con la situación tras los conflictos en Catalunya. Ante las quejas de algunos agentes de la policía catalana por supuestas presiones de los mandos por “españolistas”, Zoido señaló que “si lo que dicen es verdad, es motivo de preocupación”. En este sentido, añadió que el Ministerio del Interior tratará de corregir disfunciones, pero siempre en el ámbito de su competencia y siendo respetuoso con las que poseen los Mossos d’Esquadra.
Las leyes de personal de la Guardia Civil y de la Policía Nacional aprobadas en 2015 recogen la denominada “pasarela”, si bien aún no cuentan con un reglamento de desarrollo. Ambas normas contemplan que agentes de las fuerzas de seguridad autonómicas -Ertzaintza, Mossos d’Esquadra y policía canaria y navarra- puedan ingresar en los otros dos cuerpos en la escala y categoría equivalente a la que ostentan en su cuerpo de procedencia y siempre que tengan la titulación requerida. - DNA