BILBAO. Ortuzar ha ofrecido una rueda de prensa en Bilbao, junto al precandidato a la secretaría general del PSE de Bizkaia Julián Celaya y el representante de Izquierda Socialista Paco Alvarez, con motivo del cierre este miércoles del plazo de presentación de avales para concurrir a las primarias.

La otra precandidata, la actual secretaria general, ha anunciado que ha recabado un total de 3.213 avales, con lo que sextuplica los 543 apoyos que necesitaba para aspirar a la reelección en su cargo. Por su parte, la candidatura deUnai Ortuzar ha eludido precisar el número exacto de respaldos que ha recogido, si bien ha asegurado que se han conseguido recoger "cientos de avales", pese al "poco tiempo" del que ha dispuesto para "ir a las agrupaciones".

Según ha indicado el precandidato, esta cifra "de sobra" supera los porcentajes del 2% y el 3% aprobados en el 39º Congreso del PSOE. y estarán "cerca de los quinientos y pico" de avales que serían necesarios si se aplicaran los porcentajes del 10% para las primarias de Euskadi y del 20% para los territorios.

"La filosofía que salió del 39 Congreso es que los avales nunca sean un handicap para que un candidato desconocido pueda presentarse", ha insistido Unai Ortuzar.

Los críticos impugnaron el Comité del PSE-EE, que convocaba las primarias y el Congreso de los socialistas vascos, porque, a su entender, "no cabía la convocatoria de un comité extraordinario" para "resolver algo ordinario". Según ha explicado Paco Alvarez, si el proceso se hubiera convocado de forma ordinaria, se habría tenido que celebrar tras el Congreso Federal y, por tanto, con los nuevos porcentajes de avales aprobados.

De esta manera, ha denunciado que se ha pretendido "garantizar que la renovación no fuera inmediata en el PSE-EE y perpetuarse la actual dirección en el poder", a pesar de haber "cambiado el proyecto político a nivel federal", y aplicar los "porcentajes leoninos" que establecían las normas vigentes antes del Congreso Federal.

Las impugnaciones presentadas se encuentran aún pendientes de resolución por parte del PSOE. En cualquier caso, ha explicado que las disposiciones transitorias acordadas en el Congreso Federal establecen que esta "drástica" reducción del porcentaje de avales requeridos debe ser de "aplicación inmediata".

Pese a ello, ha criticado, el Comité de Etica del PSE de Euskadi ha considerado que "se aplica la vieja normativa derogada" porque la convocatoria del proceso vasco fue anterior al Congreso Federal, y se mantienen los porcentajes del 10 y el 20% que son "una práctica casi insalvable".

"No sé si pasaremos el 10%, ahí andaremos. En ese caso, si Idoia Mendia es proclamada secretaria general sin someterse a las urnas, impugnaremos la proclamación e iremos hasta el final porque entendemos que se vulnera la parte de normas estatutarias, principios constitucionales que tratan de favorecer la libre concurrencia y participación democrática", ha señalado Alvarez.

Según ha precisado, la impugnación se producirá si la precandidatura de Ortuzar no puede concurrir "por no superar el 10%, pero sí el aprobado en el Congreso Federal". "Si se ha planteado un proyecto de renovación del partido, no podemos decir que en Euskadi se aplaza esto cuatro años", ha insistido.

ESTUDIAR LA VIA JUDICIAL

Los críticos se plantean afrontar los mecanismos de recursos en el PSOE y, una vez agotada esta vía, estudiarán la conveniencia de acudir a la vía judicial". "En principio, tenemos la intención de ir hasta el final en que se apliquen las modificaciones del Congreso del PSOE", han asegurado, para advertir de que, si es atendida la petición de anulación, el proceso tendría que repetirse.

Ortuzar ha destacado, asimismo, que "la inmensa mayoría" de las federaciones socialistas "entienden que se deben aplicar" los nuevos porcentajes de avales y no acogerse "al modelo castigador al precandidato".

En el caso del proceso de Bizkaia, donde se han presentado como precandidatos Julián Celaya y el actual secretario general, Mikel Torres, Celaya ha afirmado que se produce la misma situación que en el proceso vasco con el agravante de que son necesarios "casi 600 avales".