BILBAO - Dos meses y medio después de la escenificación del desarme de ETA, la izquierda abertzale protagonizará hoy un significativo gesto para confirmar con acciones concretas su apuesta por la senda de la paz y la convivencia en Euskadi. En un acontecimiento sin apenas precedentes, un ayuntamiento regido por EH Bildu impulsará un acto en recuerdo a víctimas de la organización terrorista. El Salón de Plenos del consistorio de Errenteria albergará esta tarde a las 18.30 un homenaje en memoria de José Luis Caso y Manuel Zamarreño, concejales del PP, y del policía municipal y exedil del PSE Vicente Gajate.

El acto de Errenteria es todo un hito dentro del reposicionamiento de la izquierda abertzale respecto a la lucha armada. Se trata también de un importante impulso después de que su postura en contra de la violencia se haya visto algo difuminada en las últimas semanas, ya que EH Bildu se ha abstenido en varias declaraciones parlamentarias para condenar acciones perpetradas por ETA. Sus representantes han venido argumentando que esas mociones, que promovían el derecho al recuerdo y a la reparación, debían extenderse a todo tipo de víctimas, independientemente de sus verdugos.

En todo caso, no es casual que un guiño de estas características provenga del Ayuntamiento de Errenteria. La localidad guipuzcoana, la tercera más poblada de todo el territorio histórico, fue objetivo de múltiples ataques de ETA. Ahora se ha convertido en un referente de convivencia con un regidor de EH Bildu y sin concejales del PP. En 2011 Julen Mendoza recuperó para la izquierda abertzale una Alcaldía regentada por el PSE de 1983 en adelante. Desde su llegada a lo más alto de la corporación local, su mandato se ha caracterizado por tratar de encontrar espacios comunes de entendimiento entre representantes de ideologías políticas radicalmente distantes, algo que todos ellos han reconocido. De hecho, el trabajo de Mendoza fue recompensado por la propia coalición abertzale, que le designó su representante en la reunión que el lehendakari, Iñigo Urkullu, mantuvo hace dos años con los alcaldes de los 128 municipios en los que se produjeron víctimas.