PAMPLONA - Dos años después de las últimas elecciones forales que propiciaron un histórico vuelco político en Nafarroa, la mayoría de la sociedad no solo mantiene intacta su apuesta por el cambio, sino que la refuerza. De acuerdo con el estudio sociopolítico de Telwind para Diario de Noticias de Navarra, englobado en el Grupo Noticias, si hoy hubiera otra cita con las urnas, los grupos que sostienen al Gobierno lograrían un escaño más de los contabilizados en 2015. Si entonces fueron 26 los representantes que obtuvo la suma de Geroa Bai (9), EH Bildu (8), Podemos-Ahal Dugu (7) e Izquierda-Ezkerra (2), ahora el cuatripartito conseguiría 27, lo que le permitiría tener una mayoría un poco más de holgada que la actual.

En cualquier caso, el mapa político no ofrece cambios significativos. La única fuerza que crece en representación es Geroa Bai, que pasa de 9 parlamentarios a 10, tras experimentar un aumento porcentual de casi dos puntos (del 16,14% de 2015 al 18%).

El escaño que gana la coalición que lidera Uxue Barkos lo pierde el PSN, cuyo retroceso es casi calcado al incremento de Geroa Bai. Los socialistas, que en 2015 recibieron el apoyo del 13,63% de los votantes, vuelven a bajar su suelo histórico para quedarse en el 11,7% y ver reducido de siete a seis su número de asientos en el Parlamento foral.

El resto de los grupos del cambio conserva la representación que tiene en la presente legislatura, si bien la tendencia de EH Bildu e I-E es ligeramente al alza, mientras que Podemos ofrece algunos síntomas de ceder espacio.

El mayor repunte es para la coalición que integran Izquierda Unida y Batzarre, con casi ocho décimas más que en 2015 (del 3,76% al 4,5%) que, sin embargo, no le sirven para incrementar su representación.

La mejoría de EH Bildu, de apenas tres décimas (del 14,53% al 14,8%), es tan débil que técnicamente se puede hablar de que conserva su espacio actual. Más acusado es el descenso de Podemos (del 13,94% al 12,8%), que se deja el 1,1%, aunque conserva por muy poco los siete parlamentarios.

La encuesta también pone de manifiesto que ninguno de los tres grupos de la oposición mejora su posición con respecto a la de hace dos años. Al igual que el PSN, tanto UPN como PPN ofrecen síntomas de debilidad, lo que demuestra que su frontal oposición no es compartida por el electorado.

En concreto, UPN se deja el 1,2% y ve en serio riesgo su último escaño, que se lo disputa con Ciudadanos. La formación antiforalista que lidera Albert Rivera vuelve a rondar el umbral del 3%, que es el porcentaje mínimo exigido para acceder a la Cámara. Ciudadanos, que en 2015 se quedó a seis centésimas de irrumpir en el Parlamento (alcanzó el 2,94%), se encuentra ahora en el 3,1%. De confirmarse este resultado, el partido naranja arrebataría un escaño a UPN. Además, sigue sin levantar cabeza el PPN. Lastrado por la corrupción y con un discurso catastrofista, los populares se quedan anclados en los dos escaños y serían la última fuerza del Parlamento en el caso de que finalmente no acceda Ciudadanos.

valoración de líderes Uxue Barkos es la mejor valorada por la ciudadanía. La presidenta del Gobierno de Nafarroa, con una puntuación de 5,53, es la única que merece el aprobado, junto con el alcalde de Iruñea, Joseba Asiron (EH Bildu), con un 5,05. En el polo opuesto está el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, a quien la encuesta endosa un suspenso holgado (3,05). En cuanto a los políticos del arco parlamentario, su compañera de filas Ana Beltrán recibe otro rotundo suspenso (3,23). Se acercan al aprobado Koldo Martínez (Geroa Bai, 4,73) y Adolfo Araiz (EH Bildu, 4,51), y también superan el 4 Marisa de Simón (I-E, 4,37), María Chivite (PSN, 4,19) y Laura Pérez (Podemos, 4,05). Por debajo del 4, está Javier Esparza (UPN, 3,45). - DNA