gasteiz - El de ayer fue el esperado día, sobre todo por sus rivales, en el que Susana Díaz presentó su programa para ganar la Secretaría General del PSOE en las primarias del próximo domingo. En la agrupación de Fuencarral de Madrid, la presidenta andaluza desgranó una Propuesta de futuro que consta de 45 páginas y plantea diferentes medidas de carácter interno y otras más de gobierno que pensadas para un partido. Entre ellas, la ratificación de la Declaración de Granada del PSOE, una apuesta por el federalismo que implica la reforma constitucional, y que para Díaz tiene límites claros. “En España un socialista solo entiende dos estados: el español y el del Bienestar”, dijo la candidata, dispuesta a reconocer las “singularidades de las identidades y nacionalidades” del Estado y presta a exigir la modificación de la Carta Magna si sale elegida el domingo para acabar con el “descontento del independentismo”.
Además, la reforma constitucional, “necesaria, urgente y justa”, y consensuada, se aprovecharía para reconocer el poder municipal y dotar de legitimidad a muchos servicios que los ayuntamientos ya prestan de facto, informa Europa Press. Entre las medidas anunciadas está también la derogación de la reforma laboral o la concesión de créditos sin interés a los jóvenes.
A nivel interno, que al fin y al cabo es lo que se vota el domingo, Díaz plantea diferentes medidas bajo el epígrafe El PSOE que queremos y que España necesita, como realizar consultas a los afiliados si así lo proponen órganos colectivos o “un porcentaje significativo” de la militancia, para preguntar sobre la elección o una moción de censura a la Secretaría General, acuerdos de gobierno postelectorales o cualquier cuestión que apruebe el Comité Federal o un “porcentaje significativo” de militantes.
Plantea además crear una oficina ética “con capacidad de actuar de oficio” para luchar contra la corrupción dentro del PSOE, “dignificar” el ejercicio de la política e “impulsar el respeto a la democracia interna”. Y por instituir el defensor del militante, elegido por el Congreso, para defender los derechos del afiliado, el acceso a la información y evitar “abusos de poder”.
Además, Díaz propone que los presupuestos del partido sean públicos, que el gerente lo elija el Congreso Federal y que todos los cargos públicos y orgánicos rindan cuentas periódicamente y “hagan públicas sus agendas”.
Horas después, en Gasteiz, antes de finalizar en Valladolid su jornada de campaña, Díaz ratificaba estas propuestas y además se autoproclamaba firme defensora de las primarias en el PSOE, atacaba los Presupuestos de Mariano Rajoy y la “falta de ética” del PP, y señalaba los “vicios” de la “nueva política”.
La candidata pedía el voto para presidir un partido “sin complejos, que haga honor a nuestro legado”, que no reniegue de “Felipe González y Zapatero”; y tras el bronco debate del lunes optaba por un tono conciliador. “No quiero que nadie le falte al respeto a ningún compañero”, dijo Díaz, quien aseguró que si gana el domingo tenderá la mano a “Pedro y a Patxi y les pediré ayuda para hacer más grande al PSOE”.
la alcaldesa de parís, con sánchez Sánchez y López no están aún en esa fase de concordia. El primero prepara para mañana un mitin multitudinario en Sevilla, la ciudad de Susana Díaz, en el que participará la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y ayer mismo desde Teruel atacaba a su rival asegurando que “pareciéndonos a la derecha no ganaremos a la derecha”. El día 21, afirmó, se decide “si queremos seguir con un PSOE a la deriva o uno que ponga rumbo a La Moncloa”.
Por su parte, Patxi López cargó contra el programa de Díaz, “una oferta electoral, muy americana, muy liberal”, presentada “a cuatro días” de las primarias, y con la medida estrella de prestar ayudas económicas a los jóvenes como gancho. De Sánchez, por su parte, criticó sus “bandazos” en su intento por seducir el voto útil. “He visto a Pedro decir en la misma entrevista que su proyecto era el mío, y a la vez que solo hay dos modelos, acercándome a la posición de Díaz”, subrayó.