murcia - En la carrera por dirigir el PSOE, Pedro Sánchez se ha autodenominado el “candidato de la militancia” y bajo este mantra prometió ayer que si gana las primarias reformará los estatutos del partido para someter obligatoriamente al voto de la militancia los posibles pactos o decisiones poselectorales con otros partidos. En un mitin en Murcia, el ex secretario general sostuvo que eso es lo que hacía el Pablo Iglesias fundador de su partido a principios del siglo XX antes de llegar a acuerdos con otras formaciones políticas republicanas. “No queremos salvar al PSOE de sus militantes, sino de la abstención al PP” que permitió que gobernara Mariano Rajoy, pues “fue un error” y no es “pareciéndose a la derecha ni uniéndose a ella cómo el socialista será un partido ganador”, aseguró sin nombrarla a la presidenta andaluza, Susana Díaz, su contrincante en las primarias, a la que le gusta utilizar esa última expresión.
También sin nombrarlos, Sánchez se refirió a los expresidentes socialistas del Gobierno español Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, “ilustres compañeros” que apoyan la candidatura de Susana Díaz. “Si tuvieran 35 años menos, apoyarían la nuestra, porque estamos defendiendo lo mismo que ellos entonces: un partido socialista de izquierdas y participativo, sin miedo al futuro tras haber conquistado el pasado, sin ejercicios de nostalgia”, afirmó.
En su discurso, Sánchez se apoyó en distintas citas, entre ellas la del expresidente del PSOE Ramón Rubial sobre que quería una organización en la que los militantes se sintieran tan importantes como sus dirigentes y la del excanciller socialdemócrata de la extinta República Federal de Alemania Willy Brandt cuando sostuvo que los que se aferran al pasado no liderarán el futuro. También la de Pablo Iglesias, fundador del PSOE, que habló de que las organizaciones políticas son fuertes no solo por los ideales que defienden, sino también por la ejemplaridad de sus dirigentes. En este sentido, exhortó a que el episodio que protagonizó sea el último en el que “un secretario general tenga que dimitir por cumplir con la palabra dada” de no facilitar el Gobierno al PP. “Estamos a las puertas de un nuevo PSOE. Vamos a dejar atrás y cambiar aquel en el que cuatro o cinco lo dirigían, por el de la militancia”, insistió.
López apela a la unidad Si Pedro Sánchez es el “candidato de la militancia” a Patxi López se le podía calficar como el de la “unidad”. Y es que en un acto celebrado en Sántander, el ex lehandakari aseguró que va a mantener su candidatura de “unidad” a pesar de que le hagan “ofertas de un lado y de otro” porque él no va a tomar parte en un “enfrentamiento” que soo está generando “crispación y división” en la militancia del partido. “Nosotros no vamos a armar bloques enfrentados, vamos a unir. Nosotros no vamos a cavar trincheras sino a tender puentes”, enfatizó, y afirmó que “todos nos hacen ofertas de un lado y de otro para que nos vayamos con ellos” pero él seguirá adelante con su proyecto para el PSOE.
Para López, puede que las otras candidaturas piensen que habla “mucho de unidad pero no la practica”, pero es “porque no están entendiendo nada”. Así, aseguró que Pedro Sánchez y Susana Díaz tiene que entender que “unir no es armar bloques y enfrentarlos y la unidad no es unir a medio partido para enfrentarse al otro medio sino estar todos juntos”.
También lamentó que las otras candidatura estén haciendo llamamientos al “voto útil” y que dirigen a quienes apoyan su proyecto. “Unos quieren el voto útil para Pedro Sánchez y ver cómo se cargan a Susana Díaz y otros lo quieren para Díaz para cargarse a Sánchez. Pues yo llamo a los militantes para el voto útil para salvar al PSOE”, aseguró. - DNA