gasteiz - El auto del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco en el que decreta prisión provisional, comunicada y sin fianza para el presunto yihadista detenido el pasado 15 de febrero en Gasteiz, acusado de hacer proselitismo del Daesh en Tolosaldea, afirma que el detenido también actuaba en la capital alavesa. Según Velasco, el varón arrestado, de 41 años, no sólo trabó contactos con otros potenciales yihadistas en Tolosa, sino que además frecuentaba el entorno de la mezquita Sunna de la vitoriana calle Barrancal, donde buscaba personas afines a sus ideas para enviarlas a Siria.
Según señala el auto, el detenido mantenía estrictas medidas de seguridad para no ser interceptado por la Policía, y así desarrollaba sus comunicaciones telefónicas con tres líneas distintas, una de ellas dada de alta con nombre falso. Además, cambiaba de medios de transporte con frecuencia, dejaba pasar varios autobuses urbanos sentado en la parada, daba vueltas “sin sentido”, volvía sobre sus pasos frecuentemente y miraba “descaradamente” en todas direcciones al salir del portal de su domicilio del barrio de Judimendi.
El detenido viajó a Siria en 2013 para combatir junto con una milicia cercana a Al Qaeda, pero regresó a Euskadi días después por desavenencias con el grupo yihadista, y tras haber perdido a un compañero al que él mismo reclutó en Euskadi. Antes había adquirido experiencia militar en las guerras chechenas.
Tras su regreso a la CAV empezó a realizar labores de reclutamiento para Daesh, tal y como aseguró un testigo protegido que a punto estuvo de volar a Siria hasta en tres ocasiones, hasta que se arrepintió.
El arrestado se valía de sus “elevados” conocimientos informáticos y su capacidad para falsificar tarjetas o utilizar software formateado para actuar, y según señaló la Policía Nacional, trataba de reclutar a las personas “más permeables” a sus postulados. Cuando fue detenido, el supuesto yihadista marroquí guardaba 9.000 euros “para irse a Siria”, señala el auto. - T.D.