BILBAO - El tan traído y manido deshielo del que tanto se ha hablado en las relaciones entre el PNV y el PP o entre el Gobierno Vasco y el Ejecutivo de Mariano Rajoy no es tal. Más allá de la vía técnica abierta entre las consejerías y los ministerios, un canal que tiene un desarrollo desigual, el presidente del Ejecutivo del PP sigue sin responder a las cuestiones de Estado que reiteradamente le ha traslado el lehendakari. Esta falta de respuesta llevó ayer a Iñigo Urkullu a acusar a Rajoy de una falta de consideración, no ya hacia él como lehendakari, “sino a la sociedad vasca”.

En una entrevista concedida a Radio Popular de Bilbao, el lehendakari recordó que ha pasado mes y medio desde que Rajoy “en una muy escueta carta manuscrita” le dijo que tenían que fijar fecha para un encuentro. Una reunión para la que el lehendakari, y también por carta, había elaborado un orden del día. En los días previos a la Conferencia de Presidentes, Urkullu envió una carta a Rajoy en la que le explicaba por qué no iba a acudir a esa cita, le reclamaba un encuentro bilateral y le trasladaba una serie de cuestiones que tiene previsto plantear en esa reunión. Entre los asuntos que el lehendakari quiere tratar cara a cara con el presidente español se encuentran el cumplimiento del Estatuto de Gernika, ensanchar el autogobierno a través del pacto, negociar el Cupo y actualizar el Concierto Económico, propiciar el desarme completo y verificado de ETA o adecuar la política penitenciaria al nuevo tiempo que vive Euskadi más de cinco años después del fin de la actividad armada de ETA.

Desde el Gobierno Vasco consideran eje básico para el entendimiento que el Ejecutivo español retire los recursos a las OPEs de la Ertzaintza. Sin embargo, lo único que han oído es la petición del delegado del Gobierno español en la CAV, Javier de Andrés, para aumentar el número de efectivos de la Guardia Civil en Euskadi. A juicio del lehendakari, las declaraciones de De Andrés se encuadran en la estrategia del PP de “laminar la singularidad vasca”. “No se entiende que se plantee la necesidad de reposición en más número de guardias civiles en Euskadi en contraposición a lo que pueda ser el desarrollo de la Ertzaintza como Policía integral, que lo es”, aseguró.

Fuerzas residuales En similares términos se expresó ayer la consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, quien aseguró que la labor de la Policía y la Guardia Civil en Euskadi es “residual” y se circunscribe a trabajos de policía administrativa. Tras destacar la labor de policía integral de la Ertzaintza, pidió la retirada de “todos los vetos contra la Ertzaintza”, en referencia a los recursos contra las OPEs.

Para la consejera, es irrenunciable que la Ertzaintza cuente con 8.000 agentes, tal y como se pactó en la Junta de Seguridad. “La sociedad vasca demanda unos servicios de seguridad para los que son precisos, al menos, 8.000 efectivos; y desde el Gobierno de España se está impidiendo”, insistió Beltrán de Heredia, quien recordó que ha solicitado un encuentro con el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, que no ha respondido a su demanda.