gasteiz - El Parlamento Vasco volverá a acoger el debate sobre el Día de Euskadi, una discusión que ya se ha abordado otras dos veces sin que se vislumbre un consenso mínimo entre los partidos. En esta ocasión, viene impulsada por EH Bildu, que propone instaurar esa festividad el 3 de diciembre, Día del Euskera. El Gobierno Vasco ha dado vía libre al debate de la propuesta, que ahora tendrá que cubrir todas las etapas parlamentarias antes de llegar al pleno. En cualquier caso, el acuerdo no se antoja sencillo. Ahora, además, el debate tiene el componente adicional de que el PPN y UPN lo están pintando prácticamente como un conflicto institucional con Navarra y agitando el fantasma de la anexión, porque el día que propone la coalición abertzale coincide con el festejo de la comunidad foral.
La coalición abertzale, que cuenta con 18 escaños de un total de 75, es la única que está haciendo bandera del debate. El PNV se maneja con pies de plomo porque cree que el Día de Euskadi entronca con la concepción del país que tenga cada uno, y no ve prudente imponer una festividad en ese terreno si el consenso no es muy elevado. Algo parecido piensa Elkarrekin Podemos, con el matiz de que, en su caso, uno de los socios de la coalición, Ezker Anitza, también ha apostado activamente por situar la conmemoración en el 3 de diciembre, un dato que puede ayudar a decantar su postura. Desde el socialismo no quieren avanzar su decisión, aunque los precedentes no apuntan en dirección al 3 de diciembre: en su día fueron los impulsores de la fecha del 25 de octubre al entender que el Estatuto es la figura que mayor consenso suscita. El PP de la comunidad autónoma comparte el argumento de sus compañeros navarros y de UPN, y lo interpreta todo como una treta para que los dos territorios celebren su día en la misma jornada.
Los primeros en proponer que Euskadi tuviera un día festivo fueron los socialistas y el PP durante el gobierno de Patxi López, un mandato en el que tuvieron mayoría absoluta por la ilegalización de la izquierda abertzale. Que aprobaran la festividad en esas condiciones fue de por sí motivo de fricción con el nacionalismo vasco, que además consideraba un sarcasmo que la fecha escogida fuera el 25 de octubre, el aniversario de un Estatuto de Gernika incumplido en la medida en que no se han completado las transferencias y algunas competencias han sido invadidas por el Estado. El debate quedó viciado desde entonces y se retomó en 2013, poco después de que el PNV volviera al gobierno, esta vez con la intención de derogar ese día. Los jeltzales no tenían intención de proponer uno alternativo porque pensaban que no habría consenso y que no se podría imponer una celebración semejante si parte de la sociedad no la comparte. EH Bildu, por el contrario, propuso el día 3 de diciembre.
posiciones Fuentes jeltzales explican a DNA que el debate lo está llevando su portavoz parlamentario, Joseba Egibar. No quieren adelantar su postura, pero toman cierta distancia al recordar que, para los jeltzales, la fiesta vasca es el Aberri Eguna, que se celebra el domingo de resurrección. Aun así, no ven claro que ese día u otro deba ser festivo por ley. A modo de dato, no quisieron sumarse a EH Bildu en 2013.
En Elkarrekin Podemos, su portavoz parlamentario, Lander Martínez, consideró “positiva” y “una buena opción” la propuesta de EH Bildu, pero cree que debe salir adelante “con el mayor consenso posible” para que sea una fiesta que “todos los vascos sientan como propia”. “Tiene que generar un consenso suficiente, para no tener que andar revisándola todos los años y haciendo juego político con ella”, dijo a la prensa. Desde el PP, Carmelo Barrio aseguró a este periódico que su partido está en contra, no porque se aluda al euskera, sino porque “quiere unificar festividades con Navarra”. “No es inocente. Busca la provocación a Navarra”, zanjó. Sigue pensando que el día que mayor consenso suscita es la celebración del Estatuto, porque trajo instituciones propias para Euskadi y un largo catálogo de competencias. Fuentes del PSE, en el gobierno de coalición con el PNV, no adelantan su posición, pero recuerdan que el debate no es nuevo y no se muestran muy entusiastas.
A pesar de las críticas del PP, en Nafarroa, gobernada por Geroa Bai (donde está el PNV), Podemos, EH Bildu y Ezkerra, se lo han tomado con mayor filosofía. La portavoz del Gobierno, María Solana, aseguró que el Día de Navarra “no está en riesgo” y que el Parlamento Vasco es soberano para debatir las cuestiones que estime oportunas.
El Parlamento celebrará los dos próximos plenos el 26 de enero y el 2 de febrero, aunque hay muchos asuntos en cola y no está claro que el Día de Euskadi entre en primer lugar.