Pamplona - El trabajo que la dirección general de Paz, Convivencia y Derechos Humanos del Gobierno de Nafarroa ha desarrollado en el último año empieza a dar sus frutos. Al menos, así lo entienden las 50 víctimas del terrorismo y las 21 de motivación política con las que ha contactado en este corto espacio tiempo, que han puesto en valor el pionero programa de atención impulsado y han dado muestras de su agradecimiento.
La consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Gobierno foral, Ana Ollo, y el director general de Paz, Convivencia y Derechos Humanos, Álvaro Baráibar, dieron cuenta ayer del balance de las políticas públicas de paz y convivencia llevadas a cabo en 2016. La respuesta no ha sido uniforme. Algunas se ha limitado a establecer contactos telefónicos y otras han mantenido además reuniones personales.
Solo ha habido un caso que ha rehusado la colaboración del Gobierno. También ha habido otros que valoran el ofrecimiento, aunque ya no lo necesiten porque “ya han pasado por el periodo de duelo”, contó Baráibar, que subrayó que muchas dicen que “es la primera vez” que les llaman desde el Gobierno “y muestran su agradecimiento”. En el caso de las víctimas de la violencia política, la receptividad ha sido plena, ya que “nunca habían recibido ningún tipo de atención por parte del Gobierno”. - J. Encinas