BILBAO - Los socialistas vascos afrontan una intensa precampaña de cara a las elecciones autonómicas intentando encontrar su espacio propio, dejando atrás el acuerdo de estabilidad alcanzado con el PNV en la legislatura anterior y previendo la irrupción de Podemos en la Cámara de Gasteiz. Ante una previsible fragmentación del arco parlamentario que obligará más que nunca a llegar a acuerdos entre varios grupos, el PSE podría tener tras el 25-S la llave de la gobernabilidad en la CAV y encargarse de decantar la balanza entre mantener en el poder a los jeltzales como han hecho durante los últimos años o sumarse a una hipotética alternativa con otras fuerzas de izquierdas. Frente a ese delicado escenario, la candidata a lehendakari de la formación de la rosa, Idoia Mendia, reconociendo que pueda sonar a tópico, avisa de antemano a todas las partes implicadas sobre las intenciones de su partido: “Acordaremos en función de los contenidos, no de las siglas o de la coyuntura política”.
La semana pasada Mendia ya trató de marcar distancias con el PNV al no resignarse a convertirse en “su comodín” para seguir en Ajuria Enea tras el 25-S. Una vez tocado ese flanco, ahora ha decidido poner tierra de por medio también con Elkarrekin Podemos, desde donde ya han llamado a la puerta para tejer un futuro acuerdo. La aspirante del PSE advirtió ayer a la plancha encabezada por Pili Zabala de que no cuenten con ellos si su principal objetivo es “seguir los pasos de los nacionalistas y sentar las bases para un acuerdo tripartito que sólo busca la consulta, la ruptura y la autodeterminación”. De esta manera, la socialista puso sobre la mesa un posible pacto entre PNV, EH Bildu y Podemos que avance en una senda de carácter soberanista.
En cualquier caso, Mendia no se cierra en banda ante ningún escenario poselectoral y matizó que aún es pronto para decidir los pactos cuando ni siquiera se ha dado el pistoletazo de salida a la campaña electoral, aunque añadió que Podemos Euskadi sigue siendo toda una incógnita política. “Lo único que conocemos es su candidata a lehendakari, pero nada se sabe de su proyecto ni la gente de la que se va a rodear”, subrayó la aspirante socialista. En el mismo sentido, considera que “sus peleas internas” deben dar paso a la consolidación de un proyecto con el que, pese a todo, no descarta encontrar puntos en común que les permitan trabajar codo con codo durante la nueva legislatura. “Si Podemos empieza a prestar atención a los problemas sociales de la ciudadanía vasca y menos a las aspiraciones nacionales de unos pocos, seguro que nos encontramos”, recalcó.
La cabeza de lista del PSE por Bizkaia aprovechó, asimismo, para incidir una vez más en no dar por hecho un acuerdo con los jeltzales, algo que ha criticado duramente en los últimos tiempos para evitar ir al rebufo de los nacionalistas. “Firmamos un acuerdo de estabilidad con el PNV, sí, que ha permitido dar un giro social a las políticas públicas en Euskadi y tener unos Presupuestos que ayudasen a impulsar políticas de empleo y sostener nuevos servicios públicos”, justificó. Al mismo tiempo, quiso subrayar que la política de acuerdos de los socialistas durante la anterior legislatura autonómica no solo se ha dirigido a la bancada nacionalista y que han sido capaces de aprobar iniciativas con la colaboración de otros grupos presentes en Gasteiz. “También hemos conseguido sacar adelante importantes leyes con la oposición y en contra del criterio del PNV como la ley de vivienda o la ley antifracking”, apostilló Mendia.