san martín de podes - Por mucho que Albert Rivera haga presión para conseguirlo, Mariano Rajoy no se va a echar a un lado, o al menos eso aseguró ayer en una entrevista concedida a Radio Nacional y recogida por Europa Press en la que afirmó que no siente ningún tipo de presión en el partido para que se marche -“no detecto ninguna petición”, dijo- y que, además, se siente “fuerte”. Rajoy aseguró que vive en “permanente proceso de reflexión”, pero que sólo sus adversarios políticos desearían que se retirase, como le reclama Albert Rivera al considerarlo un obstáculo para un futuro acuerdo de gobierno. “La valoración para mí entre los que votan al PP es satisfactoria y el partido me está ayudando mucho”, afirmo Rajoy, y a tenor de los apoyos recabados parece ser cierto que su posición es fuerte.
“Si el que ha quedado primero en las elecciones tiene que irse, ¿qué tiene que hacer entonces el que ha quedado cuarto?”, se preguntó desde Melilla Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta en funciones. En la misma línea, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, invitaba a Rivera a que “se preocupe de sus asuntos” y deje de “dar lecciones” al PP para que “quite a su candidato”.
Rajoy se pronunció además sobre la propuesta lanzada por el responsable económico del PSOE, Jordi Sevilla, de que salga elegido presidente el candidato que más apoyos parlamentarios recabe, una afirmación que se ha interpretado de diferentes maneras pero que para el presidente en funciones no es sino un llamamiento a repetir el esquema de la ya extinta legislatura salida de los comicios del 20-D. Ese planteamiento, dijo, “está agotado”, y por ello defendió que salga elegido el candidato que represente a la lista más votada en las urnas, y no el que más apoyos logre reunir en el Parlamento a partir de los pactos que puedan darse.
“Esa es una fórmula que ya está agotada, porque se agotó el día en que el señor Pedro Sánchez se presentó a la investidura”, señaló el líder del PP, para quien “no es lo mismo ser el más votado que ser el más votado con tres o cuatro partidos, porque en este caso no eres el más votado ya que no es lo mismo el conjunto de los votos de los ciudadanos que los votos de otros partidos políticos”.
Así, Rajoy cree que buscar mayorías parlamentarias en un escenario similar al de la pasada legislatura sólo serviría para volver a repetir las elecciones, y en ese caso “el ridículo sería monumental”. Además, afirmó, sería una falta de respeto a la voluntad de los votantes que el partido con más apoyo en las urnas hiciera presidente del Gobierno al segundo, tercero o cuarto.
Y si, como señalan las encuestas, él resulta ser el candidato con más respaldo en las urnas, hablará con todos los demás líderes con el objetivo de que “no se vuelvan a repetir las elecciones de ninguna de las maneras”. Su apuesta, en todo caso, es cerrar un acuerdo con el PSOE con independencia de que este partido quede segundo o tercero en los comicios.
Más allá fue el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, quien pidió al resto de formaciones políticas que “firmen por escrito” la garantía de dejar gobernar a la lista más votada en los comicios del 26-J.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación en funciones, José Manuel García-Margallo, aseguró en una entrevista a Antena 3 que los barones del PSOE son partidarios de que los socialistas se abstengan si acaban siendo terceros para dejar gobernar a Rajoy.