Sí, fue del cha-cha-cha, que me volvió un caradura por la más pura casualidad?”. Gran canción de Gabinete Caligari que viene a bien traerla a esta columna, que pretende cierta seriedad después de haber vivido cuatro meses de grotesca política ficción. Mediocridad, nula visión de futuro, primacía de los intereses personales y partidistas antes que los generales, trilería abrupta, nulo liderazgo, riesgo cero, carencia absoluta de cintura, ataques de soberbia, ninguneos, postureos, egoísmos, chulería y lo que más me molesta: tomadura brutal de pelo al respetable público votante. ¿Dónde está la autocrítica? ¿Es que no hay nadie responsable de llevar a ese pueblo, al que tanto dicen querer, a seis meses de no gobierno y a una repetición de comicios para arreglar lo que ellos no son capaces de solucionar?

España en serio era el lema del PP en la campaña electoral del diciembre pasado. En serio no se lo ha tomado ni usted, sr. Rajoy, ha pasado de todo, fumando un puro ha esperado al fracaso del resto mientras no ha hecho nada, ni iba usted en serio, ni en serio se lo ha tomado, no ha arriesgado un pelo por su España y además creo que ni le importa. Flojo, Mariano, flojo.

Un futuro para la mayoría era el lema del PSOE. Bien visto, sr. Sánchez?, ni futuro, ni mayoría, ni nada de nada. Con la casa al garete es difícil salir peinado, y aunque algo sí ha trabajado, parece que incluso dentro del PSOE hay gentes que se alegran del fracaso obtenido. Aquello de “¡Cuidado, todos al suelo que vienen los nuestros!” parece tener una vigencia absoluta en la casa socialista actual.

Un país contigo decía Podemos. Me troncho? ¿No habrá querido decir Un país conmigo de mí, y sin mí de conmigo no hay nada que hacer porque soy yo, de mí, el llamado, y sin mí no hay tú ni vosotros que valga?? ¡Jopé con la nueva política circular y con la trasparencia infinita! Además de no aportar nada, se ha cargado al tercero del partido, mano derecha de Errejón, por un “opinar distinto”? Si esto es “la nueva política” creo que mejorando la vieja andaremos mejor?

Con ilusión proponía C’S. A éstos sí les han faltado votos ilusionantes, pero de ilusión o tal vez de espejismos han andado sobrados. Han querido jugar a ser masilla que uniera a diferentes y al final se han quedado desilusionados viendo que las matemáticas siguen siendo una ciencia exacta y que solo tenían 40 diputados.

Grecia y España más unidas que nunca, dos únicos ejemplos de repetición de elecciones por incapaces de llegar a pactos, en una Europa donde estos están a la orden del día, y para más inri tenemos que aguantar que la culpa de todo esto es del cha-cha-cha?