MADRID - Sabedor de que el gancho electoral de la posible alianza entre Podemos e IU recae en mayor medida en Pablo Iglesias, y que el secretario general del partido morado será cabeza visible de la lista que podrían conformar para la repetición de las elecciones, sin embargo el portavoz de IU, Alberto Garzón, confía en tener una posición de cabecera en la candidatura conjunta. Así lo apuntó ayer. Su relevancia en el panorama político le hará seguir siendo vital en su partido, pero confía en que la confluencia no suponga “esconderlo en ninguna provincia”. En cuanto a las siglas, según vaticinó, no existirá “un problema semántico” para abrazar una “colaboración electoral” que, en todo caso, se traducirá en el “reconocimiento” de la identidad de todas las fuerzas que participen.

El portavoz de IU asumió que la confluencia electoral, que aún está en fase de “conversaciones exploratorias”, motivará la cohabitación de “dos referentes”. Y él “seguiría” siéndolo en el seno de su formación. La conformación de las listas, no obstante, puede ser uno de los principales motivos de fricción entre ambas partes. No en vano, deberán de enlazar representantes de los dos bandos conservando el peso específico que a cada uno otorgaron los votos del pasado 20-D, cuando Podemos obtuvo más de cinco millones de votos e IU rozó el millón de papeletas. Además, habrá que conservar la paridad. Pero Garzón ya sabe que Iglesias será el candidato a la presidencia, un puesto de cabecera que, además, cuenta con la ventaja de “articular” tanto a los votantes de la formación morada como a los que no lo son. Es lo “natural”, certificó. Por el contrario, su puesto estaría sujeto a “la negociación”, pero lo natural” es que llegue a ocupar un emplazamiento en la candidatura por Madrid, lo que le hipotéticamente le haría situarse como número tres y relegaría al secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, al quinto puesto.

Lejos de crear un nuevo “sujeto político”, desde IU prosiguen apelando a edificar una “coalición clásica”. Esa postura chocaría de principio con las tesis mantenidas por Errejón, si bien Podemos parece estar mostrando mayor receptividad en esta cuestión que el pasado otoño, cuando quedaron en nada las negociaciones para alumbrar una confluencia de fuerzas de izquierda que pasara por encima del PSOE. La segunda oportunidad que se abre ahora tendría que permitir una candidatura con más agentes de izquierdas para “disputar perfectamente” el Gobierno al PP de Mariano Rajoy, remarcó. “Alternativa” a la entente entre populares y Ciudadanos, Garzón descartó que las desavenencias aireadas en público durante las últimas semanas por algunos primeros espadas de IU devengan de las intentonas por construir la coalición con Podemos. “Hay disensiones políticas”, reconoció el portavoz parlamentario, pero especificó que son debido a lo “ocurrido en los últimos años”. La alianza con Podemos, de hecho, “cuenta con una mayoría implacable”, avaló para subrayar el apoyo a sus tesis que a su juicio ha ofrecido el coordinador federal, Cayo Lara, frente a la oposición personificada en Gaspar Llamazares -de Izquierda Abierta- que es “casi individual”.

Interlocutores Sin haber arrancado todavía las negociaciones formales para diseñar la confluencia -pese a que algunos medios han publicado que estaría a punto de certificarse-, Alberto Garzón adelantó que esos contactos no comenzarán hasta que no se convoquen oficialmente los comicios del 26 de junio. Confía en que sea pronto, a la par que ve “más cerca” hollar el éxito en este sentido.

La presumible mesa a dos, empero, se convertiría en una de más interlocutores a la que se podrían llegar a sumar “todos aquellos” partidos que se sentaron con el PSOE para intentar “formar un Gobierno que pivotara desde la izquierda”. Junto a IU estarían, por lo tanto, Podemos y Compromís. Idea “arrolladora” si todos los participantes tienen claro que “hay que ir a una confluencia bien hecha”, Alberto Garzón resumió gráficamente los puntos fuertes y los débiles de la fórmula conjunta. “Si no se hace bien, puede incluso restar; pero si se hace bien, puede multiplicar”, recalcó el candidato de IU.