Madrid - Vigía de cualquier tipo de movimiento que el PSOE ejecuta para facilitar la investidura de Pedro Sánchez, Ciudadanos ya ha dado su no rotundo a la posibilidad de entrar a formar parte de un gobierno a tres bandas con los socialistas y Podemos. El obstáculo sigue siendo la formación morada. Abiertos a buscar “espacios de acuerdos” en una mesa de diálogo compartido sobre la que se traten aspectos programáticos, el vicesecretario general José Manuel Villegas quitó hierro al encuentro entre Sánchez e Iglesias. “No cambia nada”, señaló, para seguir esgrimiendo la fortaleza del acuerdo de legislatura suscrito en febrero entre C’s y los socialistas que desembocó en fracaso en la primera intentona de la investidura. “Si alguien viene equivocado, ya le explicaremos de qué van las reuniones”, evidenció.
Retomadas las conversaciones, Ciudadanos parece no atisbar ninguna duda de lo que pueda acontecer, especialmente con los cantos de sirena que su socio preferente lanza a Podemos para esquivar una vuelta a las urnas. Pero “más allá de las formas, las poses y el intercambio de regalitos”, Iglesias seguiría empecinado en hablar “de sillas” y de “si cede o no una vicepresidencia, que él mismo se había otorgado, a otro compañero de su partido”, resumió. Nada nuevo bajo el sol, vino a decir Villegas, por parte de una formación que sitúa “el centro de las negociaciones” en los programas del PSOE y de Podemos, “excluyendo” a una Ciudadanos que también acotó el campo de juego al apuntar que bajo ningún concepto permitirán la celebración de un referendum “de autodeterminación” en Catalunya, ni tampoco en ninguna otra comunidad autónoma con “singularidades”. Su segunda línea roja es la participación en un Ejecutivo a tres bandas en el que la formación morada comparta responsabilidades con la de Albert Rivera. Es “casi imposible”, apuntó, al ser dos fuerzas emergentes pero “antagónicas”. “No vamos a apoyar ni por activa ni por pasiva un gobierno que aplique el programa electoral de Podemos”, sentenció.
A la vista de la complejidad de formar un tripartito que sustente el Ejecutivo español y que el reloj corre en sentido inverso a los deseos de la formación de Albert Rivera y el PSOE, Ciudadanos sin embargo sí que se mostró partidario de entablar los contactos pertinentes -incluso para sondear un acercamiento a la gran coalición con el PP-, aunque en ningún caso con los primeros espadas de las tres formaciones bajo el foco mediático. “Si busca cámaras y focos porque se siente desplazado de la actualidad mediática, igual tiene que buscarse otra excusa, pero que no busque la complicidad de Ciudadanos para satisfacer su ego mediático”, incidió sobre el proceder de un Iglesias al que devolvió la invitación a la abstención cursada a su partido. Villegas ahondó en que estarían “encantados” de explorar esa opción, siempre que Podemos muestre su disposición a hacerlo, ya sea “por sus crisis internas o por el miedo a unas nuevas elecciones”.