bilbao - La nueva dirección de Podemos en la CAV iniciará la semana que viene una ronda de entrevistas con el resto de los partidos vascos, una vez cerrada la crisis interna que derivó en la dimisión de su anterior secretario general Roberto Uriarte y su sustitución por Nagua Alba. Según ha podido saber este diario de fuentes de la formación emergente, los contactos arrancarán a la vuelta de las vacaciones de Semana Santa y con ello pretende establecer contactos con las restantes fuerzas políticas vascas.

El equipo de Nagua Alba mantendrá contactos con todas las fuerzas vascas y lo hará “de mayor a menor” por lo que, aunque no lo desvelaron expresamente, arrancarán la ronda con los responsables del PNV, con los que podrían citarse “a comienzos de la semana”, para posteriormente hacer lo propio con el EH Bildu, PSE o el PP.

Nada más hacerse con el bastón de mando, la secretaria general, Nagua Alba, apuntó que abordar “una toma de contacto” con los partidos era una de las prioridades en la nueva etapa emprendida por Podemos en suelo vasco. Estos reuniones suelen ser la fórmula habitual para establecer relaciones cuando las formaciones eligen un nuevo equipo directivo. Más, si cabe, a la vista del periodo prelectoral en el que se ha sumido Euskadi y de que la formación asamblearia deberá sumirse en una intensa actividad en el plazo corto para preparar la cita con las urnas de la mejor manera posible. Ya ha apostado por abrir el cauce al entendimiento, toda vez que se ha erigido en una pieza central de la política tras ser la primera fuerza en las elecciones generales del pasado diciembre, una posición privilegiada que se ve reforzada con los buenos resultados que el último Euskobarómetro les brindó.

Desde la llegada de Alba a la dirección del partido hace un mes, el partido asambleario ha puesto en la diana de sus críticas al PNV y se ha marcado el objetivo de desalojarlo de las instituciones. La formación jeltzale respondió la semana pasada en un acto en Mundaka en el que el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, lamentó que “Podemos no tenga más programa” que desbancar al partido del Gobierno vasco.

Tras el PNV se reunirá, previsiblemente, con EH Bildu, formación a la que a la que enseñó la proa en las últimas elecciones generales y gana de largo según los últimos sondeos del Sociómetro y el Euskobarómetro. Sus últimos gestos nítidos por el derecho a decidir y la convocatoria por primera vez de un Aberri Eguna propio para este domingo le erigen en un serio competidor de su granero electoral habitual.