donostia - EH Bildu cree que su lugar en el próximo acto de la política vasca estará en la mitad de una hipotética pugna entre el PNV y Podemos. En una nueva etapa que la coalición espera inaugurar con las elecciones autonómicas de la CAV previstas para otoño y en las que, salvo sorpresa, recuperará a un valor del pasado como es Arnaldo Otegi como cabeza de lista, EH Bildu quiere conformar en Ajuria Enea un “gobierno a favor del cambio político y social” apoyado en el PNV y en Podemos.
Así lo expresó ayer el portavoz parlamentario de la coalición y presidente de Sortu, Hasier Arraiz, que hizo de la necesidad virtud tras los malos resultados electorales en mayo y diciembre, y fijó sus miras en el Ejecutivo de Uxue Barkos en Nafarroa y en el de Joseba Asiron en Iruñea. “Estamos aprendiendo mucho desde Nafarroa. El cambio político y social está siendo posible, está apenas comenzando y muchas veces va más lento y titubeante de lo que nos gustaría, pero entendemos que las cosas tienen que ser así. Estamos funcionando con base en debatir con otras fuerzas políticas, las del cambio que sostienen los gobiernos de Iruñea y Nafarroa”, ejemplificó Arraiz en una entrevista en Onda Vasca.
“Estas últimas semanas hemos hecho acuerdos de país importantes sobre la arquitectura institucional, como el acuerdo de la Ley Municipal (junto al PNV), una de las más importantes que se van a aprobar esta legislatura en el Parlamento. También hemos sido capaces de otro acuerdo para sacar adelante la otra ley más importante, que es la de Vivienda”.
En pleno debate interno de la izquierda abertzale en el que algunas voces han criticado la pérdida de parte de la identidad “revolucionaria” y la prevalencia de un alma socialdemócrata en las propuestas de Sortu, Arraiz empieza a plantear una posición de bisagra para EH Bildu.