Donostia - Si PNV y EH Bildu son capaces de llegar a acuerdos como el alcanzado ayer sobre la Ley Municipal, donde las posturas no se acercan es lo referente a la pacificación. Así, el portavoz de Sortu, Pernando Barrena, advirtió ayer al lehendakari Urkullu de que no le permitirán que “empiece a hacer campaña con las víctimas” y afirmó que “parece que está asustado” por la excarcelación de Arnaldo Otegi. Además, señaló que el PNV “es socio fundador de la política de dispersión” y ha usado la violencia “con fines políticos”, por lo que no aceptarán que “se ponga de perfil con su pasado y sus responsabilidades”. Barrena respondía de esta manera a las declaraciones efectuadas la víspera por el lehendakari, quien durante una visita a la empresa Michelin de Gasteiz recordó el secuestro del exdirector de la fábrica Luis Abaitua por ETA en 1979, acción por la que fue condenado Otegi a seis años de cárcel.

En una rueda de prensa ofrecida en Donostia, Barrena apuntó que el balance de la legislatura del lehendakari “es gris y anodino, es cero en materia de paz” frente a la “tarjeta de visita de Otegi”, y criticó lo que consideró “actitud patética de Urkullu”, de quien dijo que parece que está asustado por la salida de la cárcel del exportavoz de Batasuna, lo que calificó como “efecto Arnaldo Otegi”. “La élite política y mediática está nerviosa al ver la adhesión masiva que Arnaldo Otegi ha conseguido. En escasos cinco días, se ha abandonado el fair play y se ha dedicado a embarrar el terreno”, aseguró. El dirigente de la izquierda abertzale criticó que el lehendakari recordase en Michelin a las víctimas, como es “de justicia y correcto”, pero que no lo hiciese “con todas”, y le reprochó que no citara a Rafa Díez Usabiaga, trabajador de Michelin en Lasarte, el único condenado por el caso Bateragune que sigue en prisión. “Sus omisiones son más que elocuentes”, resaltó Barrena, quien afirmó que Sortu no permitirá que Urkullu “empiece a hacer campaña a costa de las víctimas, ni la supuesta superioridad moral”. En su intervención, el portavoz de Sortu cargó duramente contra el PNV, de quien señaló que “se frotó las manos con la ilegalización de la izquierda abertzale y ocupó sin miramientos las alcaldías y los cargos institucionales que les pusieron en bandeja el PSOE y el PP con la Ley de Partidos”. Además, acusó a la formación jelzale de haber usado la violencia con fines políticos. “El PNV ha sido un partido en connivencia con la violencia del Estado, socio fundador de la política de dispersión que ha ocasionado hasta la fecha la muerte de 16 personas, que supone una extorsión económica de varios millones de euros todos los años”, aseguró. Por ello, el dirigente de la izquierda abertzale se preguntó: “¿Cuándo va a hacer autocrítica por su connivencia con la violencia de Estado? ¿Cuándo va a reconocer el PNV el daño causado a este pueblo?”, preguntó, para señalar después que a la izquierda abertzale “no le van a engañar” y no aceptarán “que se pongan de perfil con su pasado y sus responsabilidades”. - E.P.