MADRID. En rueda de prensa tras el Comité Ejecutivo Nacional del PP, Casado ha ido algo más allá de las declaraciones últimas de la dirección de este partido reclamando a Barberá explicaciones públicas sobre su conocimiento de lo que se investiga en la operación Taula, la supuesta financiación ilegal del PP a través del ayuntamiento valenciano.

El portavoz ha pedido un ejercicio de reflexión para que cada uno "vea si aporta o no aporta a este partido", porque en este segundo caso "hay vida fuera de la política", ha dicho de la situación de Rita Barberá.

Y ha rechazado que la exalcaldesa pueda enviar ningún mensaje amenazante a nadie del PP, preguntado por el "cuidado con lo que decís" que le envió Barberá a la actual presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, ante la citada investigación judicial.

"Aquí no hay ninguna amenaza que se pueda hacer", ha respondido Pablo Casado, que ha añadido contundente que quizá tendría que ser él quien enviara mensajes "pidiendo a la gente que saliera a explicar lo suyo". "Yo no he recibido ninguno. Sólo faltaba", ha zanjado.

El portavoz ha insistido en que Barberá debe explicarse de manera voluntaria puesto que la exregidora defiende una gestión "impecable" en el consistorio valenciano. "Puede explicar todo esto", ha afirmado.

"ESTAMOS INDIGNADOS"

Pablo Casado se ha mostrado en la rueda de prensa contundente contra la corrupción y se ha esforzado en mostrar que todo su partido lo está, que asume las palabras tan directas que uso este fin de semana el presidente de la formación en Vizcaya, Antón Damborenea. "Estamos indignados y hasta las narices. Lo único bueno es que está habiendo esa máxima contundencia.

Y la va a seguir habiendo", ha dicho Casado sobre el asunto.

Al mismo tiempo, ha querido subrayar que cada caso que surge es personal y no colectivo, como el del valenciano Alfonso Grau, arrestado esta mañana por la Guardia Civil por un supuesto delito continuado de cohecho. "*Este señor ha hecho algo mal? Pues que lo pague y cuanto antes", ha dicho del ex vicealcalde de Valencia.

"No es una cuestión de la estructura, de partido, esto no se comparte. No conocemos ni a las personas que protagonizan esos casos, estamos cabreados como contribuyentes y militantes", ha manifestado.

EL FOCO, SOBRE EL PP

El portavoz no ha compartido las declaraciones del ministro Jorge Fernández, quien este lunes apuntaba a una campaña judicial contra el PP en plena negociación por la investidura, pero sí ha expuesto que "el foco" está sobre su partido y que él podría a su vez enumerar los casos de corrupción del PSOE, que a su juicio permanecen en un segundo plano.

"La gente sabe perfectamente que cuando Susana Díaz sale a hablar de corrupción no tiene ninguna credibilidad, incluso Felipe González tampoco la tiene", ha dicho, para añadir que él quiere que su partido sí tenga legitimidad para denunciar la corrupción, porque es "garantía de servicio a España, transparencia y honestidad". "El PP tiene que tener credibilidad porque es nuestra seña de identidad y eso hay que purgarlo y limpiarlo", ha insistido.

El portavoz ha dicho comprender que a la gente le pueda parecer insuficiente la reacción del PP contra la corrupción, pero ha querido aclarar que a veces surgen noticias "de los mismos casos que llevan sustanciándose siete años" y que no son nuevos aunque se levante un secreto de sumario y se conozcan declaraciones y grabaciones de la investigación.