madrid - La polémica abierta por la detención de dos titiriteros por su actuación en el carnaval del distrito de Tetuán, en Madrid. El PP de Madrid presentó ayer una denuncia contra la concejal de Cultura en el Ayuntamiento, Celia Mayer, por “colaboración en el enaltecimiento del terrorismo” y “desprotección de menores” en relación con la obra. En el espectáculo se exhibió una pancarta con la leyenda “GORA ALKA-ETA”, además de escenificar acciones como el ahorcamiento de un guiñol vestido de juez, el apuñalamiento de un policía, la violación de una monja y su apuñalamiento posterior con un crucifijo.
Los populares también exigen su destitución. “Los madrileños no nos merecemos una concejala de Cultura como la señora Mayer y, si la alcaldesa no la inhabilita, esperemos que los tribunales lo hagan”, apuntó el portavoz adjunto de la formación en el Ayuntamiento de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna. La edil “no se puede escudar” en que no conocía el contenido de la obra, valoró, para afirmar que los hechos no se enmarcan en la libertad de expresión, si no que “son delitos que deben ser perseguidos”.
Existen también voces contrarias a la encarcelación de los dos artistas, Raúl García Pérez y Alfonso Lázaro de la Torre. Es el caso de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quién consideró que el espectáculo “puede que fuera de mal gusto”, aunque no atisba “delito”. Censuró, asimismo, que la derecha siga “recurriendo machaconamente al ‘todo es ETA’”. - Efe