MADRID. Barrena, exmiembro de Batasuna, ha realizado estas manifestaciones momentos antes de entrar en la sala de vistas de la Audiencia Nacional, que juzga a los integrantes de ambas organizaciones por delitos que pueden suponerles penas de entre siete y diez años de cárcel.
Según Barrena "se va a encausar a 35 militantes vascos por la labor política realizada entre los años 2005 y 2007", por lo que se trata de un juicio "de clara persecución política en la medida que las personas encausadas el grave delito del que se les acusa es hacer el trabajo de político y de abrir puertas al nuevo escenario de paz y de normalización política incipiente en estos momentos en el País Vasco.".
"Hoy venimos a esta Audiencia Nacional orgullosos y orgullosas de haber realizado esa labor política en esos años, pensamos que esa labor política realizada en nombre de la izquierda abertzale por las personas aquí presentes y también por otras más en el País Vasco tiene muchísimo que ver con el actual estado de las cosas", ha añadido, para puntualizar que esta labor "fue una gran contribución para abrir puertas a la paza y abrir puertas a a normalización política".
En este punto, el exdirigente abertzale ha recordado que en un día como hoy hace 45 años también se inicio otro gran macro juicio politico, el proceso de Burgos el 3 de diciembre de 1970 "y como en aquella ocasión también se procesó a militantes políticos vascos con su labor política".
Para Barrena el Proceso de Burgos "supuso el inicio del fin del franquismo", por lo que ha expresado su deseo de que el juicio que comienza este jueves en la Audiencia Nacional "sea asimismo el último de los juicios políticos contra militantes por su labor política en el País Vasco y que suponga el inicio de un nuevo momento político en el cual los derechos de todas las personas, civiles y políticos estén gartantizados".
RETRASADO CASI UN AÑO
El juicio iba a comenzar el pasado 12 de enero pero la Sección Segunda de la Sala de lo Penal decidió aplazarlo después de que tres abogados de los acusados, Eukene Jáuregui, Haizea Ziluaga y Amaia Izco, fueran detenidos en el marco de la denominada 'operación Mate' contra el frente de cárceles.
Los fiscales Vicente González Mota y Dolores Delgado acusan a los 35 procesados de un delito de integración en organización terrorista. Consideran que se encargaron de contribuir a la estrategia de ETA para lograr que ésta pudiera mantenerse en las instituciones, tras la ilegalización de Batasuna, a través de los diferentes procesos electorales celebrados entre 2005 y 2009.
Entre los acusados se encuentran los exdirigentes de Batasuna Pernando Barrena, Marije Fullaondo y Juan José Petrikorena; la exalcaldesa de Arrasate Inocencia Galparsoro; las exdiputadas Nekane Erauskin y Karmele Berasategui; y los presidentes de ANV, Kepa Bereziartua; y PCTV, Juan Carlos Ramos.
La Fiscalía detalla en su escrito de calificación provisional la "colaboración" entre Batasuna y ANV --escindido del Partido Nacionalista Vasco (PNV) en 1930--, que "se compró con la reunión del 24 de enero de 2003 en Barakaldo", en un momento en el que Batasuna ya había sido suspendida de actividades, entre Permach e Ibon Arbulu, Antxon Gómez Llorente y Txano Guerrero en representación de ANV.
Así, existió una "sumisión" de ANV en su actuación política a las directrices marcadas por Batasuna, según señala el escrito. Sobre estos parámetros, se desarrolló una estrategia en función de "tres formas de lucha", la política-institucional, la lucha de masas, y la lucha armada.