madrid - Los tres candidatos a la Presidencia del Gobierno español tuvieron anoche la oportunidad de exponer sus propuestas sobre modelo territorial en el debate organizado por el diario El País. Y aunque por momentos se invitaron a no dejarse llevar por las malas formas, la busqueda del voto indeciso elevó el debate a la categoría de bronco.
Para aliviar las tensiones territoriales Albert Rivera, de Ciudadanos, ofreció su experiencia como catalán y diputado en el Parlamento autonómico y dijo que el modelo de las autonomías español ha sido “bueno”. “Hay que reformar España, no romperla”, resumió.
También quiere reformar la Constitución el PSOE, pero para articular un Estado federal que permita una España “unida, diversa, plural y democrática”, explicó Pedro Sánchez, que puso como ejemplo la respuesta que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapaterio dio al plan Ibarretxe en el año 2004.
Pablo Iglesias también cree que hay que reconocer la España “diversa y plural”, pero a su juicio Podemos es “la única fuerza con capacidad para asegurar la unidad del país” y además aboga por el modelo que tuvo Escocia. En este sentido ofreció “construir fraternidad” asumiendo que España es un país “plurinacional”. Su modelo hizo que sus rivales se le echaran encima, a lo que éste respondió que no hay que “tener miedo” a la democracia.
los pactos como arma Albert Rivera aprovechó entonces para recordar a Pedro Sánchez sus pactos con ERC en algunos ayuntamientos catalanes y le pidió que aclare su postura y si los socialistas seguirán “votando a favor de la independencia porque “no se puede gobernar España con quien tiene el objetivo de romper España”. Para responder a esta pregunta, el candidato del PSOE recordó que Ciudadanos concurrió a las elecciones de 2009 junto a Libertas, un partido “de extrema derecha”. “Y por eso yo no digo que Ciudadanos sea de extrema derecha, digo que es de derechas”, apuntó Sánchez, a lo que Iglesias apostilló con ironía señalando que Albert Rivera es “de lo que haga falta” para gobernar.
Pero estos no fueron los únicos pactos que se reprocharon. Y ahí apareció Navarra, ya que Pedro Sánchez trató de defenderse recordando a Podemos su pacto con EH Bildu para formar una candidatura conjunta para el Senado el Navarra. “En Navarra apoyamos el Gobierno de Uxue Barkos a mucha honra”, respondió Iglesias, que recordó que, en cambio, los socialistas permitieron un Ejecutivo “de corrupción” de UPN, y después ya tuvieron que pagar su “precio electoral” en las últimas autonómicas.- E.P./DNA