bilbao -El PNV tiene claro que habrá que aguardar hasta la celebración de los comicios generales del próximo mes de diciembre con la esperanza de que un nuevo Gobierno español sea capaz de abordar sin ambages las aspiraciones nacionales de Euskadi y Catalunya. Y es que, para la formación jeltzale, resulta más que evidente que la solución al problema de encaje de Catalunya y Euskadi en el Estado español no vendrá de la mano de Mariano Rajoy.
El presidente del Euzkadi Buru Ba-tzar el PNV, Andoni Ortuzar, realizó ayer una valoración de lo que han supuesto para el partido de Sabin Etxea los comicios celebrados el pasado domingo en Catalunya. A su entender, los resultados, con el claro triunfo de la coalición Junts pel Sí, “reflejan la madurez de la sociedad catalana y expresan su inequívoco deseo de decidir su futuro en libertad”. Para Ortuzar, los votos obtenidos por la coalición de CDC, ERC e independientes no son el final del camino, sino el inicio de un proceso que “cuenta con un aval popular más que suficiente para seguir adelante”.
En su intervención, Ortuzar reclamó del Gobierno español “un giro de 180 grados” en su manera de abordar el problema territorial pero, sin embargo, se mostró convencido de que ese cambio de rumbo en el Ejecutivo del PP no se va a producir porque “Mariano Rajoy solo está preocupado de los votos que pueda obtener en diciembre en su granero, el de la España, una, grande y libre”. El máximo dirigente de la formación jeltzale aseguró que tras los resultados del pasado domingo tenía una pequeña esperanza de que Rajoy cambiara su discurso con respecto a Catalunya, una esperanza que se desvaneció cuando ayer el presidente español ofreció su valoración de los comicios. “La noche del domingo oímos hablar a Mas con un tono conciliador, abogando por buscar una solución. Sin embargo, Mariano Rajoy habla de legislación en términos poco menos que cuarteleros”, afirmó.
Tras las elecciones Tal es la desafección del PNV con la política inmovilista de Mariano Rajoy que el presidente del Euzkadi Buru Batzar no dudó en señalar que “la política española se está arrastrado en los últimos meses,” y aseguró que el PP está haciendo un mal uso de su mayoría en Madrid aprobando cuestiones como la reforma del Tribunal Constitucional con la oposición del resto de grupos de la Cámara Baja. Ortuzar, además, afirmó que lo más lógico hubiera sido adelantar las elecciones, pero Rajoy ha decido agotar la legislatura y ahora solo queda esperar a diciembre y a que se produzca un cambio político en Madrid. “Nuestras esperanzas son que el debate se ponga sobre la mesa tras las elecciones”, enfatizó.
El presidente del PNV abogó por que se lleve a cabo un proceso de diálogo entre todas las partes. “La solución es hablar. Igual al hablar es cuando se busca una solución. Hablar, acordar, dialogar y, en el caso de que no haya acuerdo, una solución es preguntar a la gente. Pero hablar es todo lo contrario a lo que se propugna desde Madrid”, dijo.
Mayoría de votos Ortuzar puso también en cuestión la valoración que se está haciendo en el sentido de que las formaciones soberanistas ganaron las elecciones del pasado domingo en escaños, pero no así en votos. “Todo depende de cómo hagamos esa suma de votos. No creo que sea lo mismo un voto de Sí que es Pot que uno de Ciutadans. Al menos el 60% de los votos está a favor del derecho a decidir porque a los votos de Junst pel Sí hay que sumar los de la CUP y los de Sí que es Pot. También, y aunque apenas hayan logrado un 3%, están los votos de Unió”, afirmó.
Para el presidente del PNV resulta paradójico que aquéllos que apenas 48 horas antes de las elecciones aseguraban que no se trataba de unos comicios plebiscitarios ahora se amparen en los votos. “Que hagan un plebiscito con votos sí y no”, una manera, a su entender, de conocer a la voluntad del pueblo catalán.
Andoni Ortuzar se refirió asimismo al severo revés que ha sufrido Unió en estas elecciones, hasta el punto de que su máximo dirigente Josep Antoni Duran i Lleida puso el mismo domingo su cargo a disposición del partido. El presidente del PNV manifestó que el candidato de Unió, Ramón Espadaler, ya les había adelantado que iban a tener dificultades. “Unió lo tiene muy complicado y ellos eran conscientes. Cuando el debate se centra entre blanco o negro, es muy difícil y complicado mantener posiciones grises. Sin embargo, creo que es una formación llamada a perdurar”, opinó.
Por último, Ortuzar afirmó que el PNV se reafirma en la vía emprendida en Euskadi para lograr un nuevo estatus jurídico-político para el autogobierno vasco, basada en conseguir un acuerdo en la ponencia del Parlamento Vasco.