MADRID - La Audiencia Nacional llamó ayer a declarar al concejal de Ahora Madrid, Guillermo Zapata,el próximo 7 de julio alegando la posible comisión del delito de humillación a las víctimas del terrorismo en los textos publicados en su cuenta personal de la red social Twitter en enero de 2011. La imputación ha reavivado las peticiones de renuncia de Zapata, quien, a pesar de disculparse públicamente y dimitir de su cargo como concejal de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid ante la avalancha de críticas, conserva su puesto como concejal en Fuencarral.

La polémica, que supuso el primer contratiempo para el Gobierno de Manuela Carmena tan solo dos días después de su proclamación como alcaldesa, se ha convertido desde entonces en el punto débil de su Alcaldía y en el foco de ataque para los partidos de la oposición.

Irene Villa, víctima de ETA y aludida de manera directa por los chistes de Zapata y llamada a declarar como testigo, declaró no sentirse “particularmente ofendida” ya que al fin y al cabo se tratan únicamente de comentarios que no atacan directamente a su persona. También añadió que, si fueran imputadas todas las personas que utilizan este tipo de comentarios de manera pública sobre ella, “habría una cola inmensa”, aunque criticó el evidente carácter “vejatorio y humillante” de los textos de Zapata.

Otras voces como la de Ada Colau apoyaron también al edil de Ahora Madrid desde las redes sociales al señalar que Twitter era una novedad hace cuatro años y que a lo mejor Zapata pensó que era “como la barra del bar de abajo”, subestimando la difusión que podría tener a posteriori, y añadió con contundencia que no es insensible al sufrimiento. Por otro lado, la secretaria de Análisis Político de Podemos, Carolina Bescansa, calificó de “asombroso” que haya una acción tan decidida de la Fiscalía para investigar el caso cuando en los parlamentos se han rechazado comisiones para investigar cuentas en Suiza lo que tacha de “utilización partidista de la Justicia”. - A.M.