vitoria - Pese a tratarse de dos realidades diferenciadas, Euskadi sigue los pasos de Catalunya en cuanto a que el respaldo a la independencia está cediendo en su empuje. Después de que el CIS catalán constatara que en un supuesto referendo vencerían los partidarios de mantener el actual modelo de Estado -un 48% frente a un 44,1%-; el último Sociómetro elaborado por el Gobierno Vasco refleja que los vascos apostarían por la secesión delante de la urna, con un 35% de ciudadanos que votaría por la ruptura mientras que el 30% lo haría por el “no”. Ahora bien, quienes avalan un Estado propio vasco se han dejado por el camino cuatro puntos porcentuales respecto al anterior sondeo, al tiempo que los reacios a marcharse de España recuperan uno. Un 22% de los encuestados se decanta por el ambiguo no sabe/no contesta y la abstención se situaría en el 13%. El repunte a la baja del secesionismo se refrenda cuando la pregunta se refiere a la actitud sobre la independencia sin la necesidad de tener que pronunciarse con una papeleta. En ese supuesto, los que están de acuerdo con ella descienden en un año del 30% al 26%, y los disconformes crecen un punto hasta el 33%, manteniéndose en el 28% quienes la apoyarían o no según las circunstancias, con un 13% de indecisos. Es decir, un escenario que bien podría calificarse, como en territorio catalán, de impasse, que estaría perjudicando a los intereses más soberanistas.

solo aprueba urkullu En lo referente a las formaciones políticas, el informe, elaborado a partir de entrevistas efectuadas entre el 9 y el 14 de febrero a 2.142 personas, señala que PNV y Podemos se mantienen, por este orden, como las fuerzas que más simpatía despiertan entre la población vasca, con una nota de 4,3 y 4, respectivamente, destacando las dos décimas de ascenso por parte de la marca que lidera Roberto Uriarte en la CAV. Le siguen EH Bildu (3,4), IU (3), PSE (2,8), UPyD (1,8) y PP, que se despeña hasta el 1,3. Dicho estudio sitúa además al lehendakari, Iñigo Urkullu, como único dirigente que obtiene el aprobado, con un 5,1, por delante del líder de Sortu, Hasier Arraiz (4,6); el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar (4,4); la secretaria general del PSE, Idoia Mendia (3,8); la presidenta del PP de la CAV, Arantza Quiroga (2,6); y el parlamentario magenta, Gorka Maneiro (2,4).

La encuesta sentencia que el 75% de los interpelados cree necesario un cambio total en la vida política española, anhelo que se estanca en el 46% cuando se pregunta exclusivamente por la vasca, visión que evidencia las mayores carencias que se observan en el primero de los ámbitos territoriales.

Calidad de vida en Euskadi. En relación a la UE, un 39% opina que es “algo mejor” la de la CAV; y un 32%, que es “algo peor”.

La UE como institución. Un 51% de ciudadanos vascos cree que es “muy o bastante” ineficiente, con un incremento de 18 puntos respecto a 2007.

Apego a Europa. Solo un 17% de la población vasca lo siente. Mucho mayor lo tiene por su propio pueblo o ciudad (64%), como por Euskadi en general (66%), adhesión que respecto a España se atora en el 20%.

Expectativas de futuro. Se nota cierta mejora: en el caso de Euskadi la nota pasa de 5,2 a 5,5, y en el de España, de 3,4 a 3,8.

Problemas de los vascos. Lideran los ligados al mercado de trabajo (83%), por delante de los económicos (20%), conflicto político (13%) y corrupción (12%).