Gasteiz - Rebeka Ubera lleva una semana como secretaria general de Aralar, pero son muchos años de complicidad con Patxi Zabaleta, con quien espera seguir trabajando en equipo junto al resto de la militancia del partido de la izquierda abertzale.
Secretaria general de Aralar con el 85% de votos. Alguno puede pensar en una elección ‘a la búlgara’.
-A la búlgara no, porque si algo caracteriza a Aralar es un militante, un voto. Los debates son abiertos y todos pueden presentar su candidatura. Es un reto que asumo con total responsabilidad y espero estar a la altura de las circunstancias del momento político tan importante que vivimos.
Muchos años al lado de Patxi Zabaleta, ¿es difícil sustituirle?
-Es una gran responsabilidad, pero cada persona es única y yo no pretendo sustituir a Patxi. Lo que espero y pretendo es desempeñar esta labor lo mejor posible en lo que se refiere al cargo de secretaria general. Pero ante todo tengo que señalar que soy militante. Yo me considero militante de Aralar y de la izquierda abertzale. Espero seguir trabajando con Patxi y con todos los militantes del partido. Hacer un trabajo en equipo y con un marcado tinte continuista.
Primera secretaria general -se estrena este cargo-, pero ¿también la última? Lo digo por la posibilidad de que Aralar y Sortu confluyan en un único partido.
-La decisión la tomará la militancia como otras decisiones que hemos ido tomando. Siempre hemos defendido una estructura de izquierda abertzale amplia y plural, pero eso no significa que Aralar deba desaparecer. Aralar se tendrá que ir adecuando y la militancia tendrá que decidir cuál es nuestro papel.
Pero Aralar tiene aprobado congresualmente ir hacia una única estructura de la izquierda abertzale.
-Es uno de los principales objetivos y en eso hemos intentado avanzar. ¿Cómo se va a estructurar esa izquierda abertzale amplia y plural? Pues se tendrá que decidir entre todos los partidos. Cada uno tiene su opinión y todos tendrán que decidir. Además, EH Bildu no es una coalición al uso formada solo por partidos. Buscamos que se abra, que haya cabida para todas las personas soberanistas, independentistas, de izquierda y que ayuden para impulsar el cambio. Y llegará la hora donde la militancia de Aralar tendrá que decidir en ese sentido.
¿Es Sortu quien marca el camino a seguir dentro de EH Bildu?
-Nosotros entendemos EH Bildu como un acuerdo entre diferentes y cada uno con sus matices. Cada partido aporta desde su cultura política y nadie se siente supeditado a otro.
Minutos antes de esta entrevista -tuvo lugar el pasado jueves- se ha realizado un homenaje a Santi Brouard en el Parlamento Vasco ¿Es un paso más en el proceso de normalización política?
-Es un paso muy importante porque si queremos conseguir esa convivencia democrática entre diferentes es fundamental reconocer y reparar a todas las víctimas de todas las violencias. Hay que seguir trabajando para construir la memoria entre todos, aunque somos conscientes de que habrá relatos diferentes y cada uno tendrá su propia perspectiva. Es importante recoger todos esos relatos y verdades para ir construyendo la memoria desde el respeto entre todas las posiciones.
Han pasado ya tres años desde que ETA anunció el final de su actividad. ¿El proceso va más lento de lo que cabía esperar entonces?
-La resolución de los conflictos no suele ser fácil. Siempre esperas que los resultados lleguen pronto, pero hay que tener paciencia. No hay una línea recta, sino que a veces se avanza en zigzag. Lo importante es hacer una reflexión sobre qué podemos aportar cada uno a este proceso. Yo creo que todavía se está trabajando desde la trinchera y desde la exigencia, y hay cuestiones, como son el tema de la memoria o el de los presos, que se deben resolver.
Habla de los presos. ¿Qué opina de las peticiones individuales que van a realizar a la Justicia para pedir su acercamiento a cárceles vascas?
-Es urgente acabar con la dispersión y con esa política penitenciaria de excepción. Es vergonzoso que tengan que pedir el acercamiento a Euskal Herria cuando tendría que ser algo automático. Este tipo de cuestión se debería resolver en otro tipo de ámbitos y no en el judicial. Esperemos que antes de que decidan los tribunales seamos capaces de avanzar. Pero no podemos esperar nada del Gobierno español, por lo que es importante que alcancemos acuerdos en Euskal Herria. No solo entre los partidos, sino también con la sociedad.
Otro factor es reconocer el dolor y el sufrimiento de las víctimas.
-EH Bildu lo ha hecho, y no solo una vez. Hemos reconocido a las víctimas en todos los ámbitos en los que estamos presentes, tanto en el Parlamento Vasco, como en el de Nafarroa o en los ayuntamientos. EH Bildu y los partidos que lo conforman lo hemos dicho de una forma clara. Lo podemos decir más alto, pero no más claro.
Y hay un tercer factor. ¿Por qué ETA no se ha disuelto aún?
-Entendemos que ETA ha cesado definitivamente en su lucha armada y que en el último comunicado dejó claro que ha desmantelado sus aparatos organizativos y logísticos. Así, entendemos que está ya desarmada y que se ha convertido en una organización civil. Y también que es muy importante que ETA continúe como organización civil para que realice esa autocrítica que debe hacer sobre el pasado y que siga hasta que todos los presos y presas se reintegren en la sociedad. ETA debe hacer esa revisión crítica del pasado, pero consideramos que todos deberíamos hacer esa revisión para conseguir la paz.
Sin embargo, y tal como señaló Paul Ríos, coordinador de Lokarri, para una víctima es muy difícil ver las siglas ETA, aunque sea convertida en una organización civil.
-Pero creemos que el ciclo se debe cerrar. ETA inició su andadura por razones políticas y debe cerrar su ciclo como organización civil. Es importante cerrarlo si queremos conseguir una sociedad humanizada y lograr la paz.
¿El reto de EH Bildu es mantener Gipuzkoa y ganar en Araba en las elecciones municipales?
-Queremos sumar para impulsar el cambio. Es importante que se dé el cambio en Nafarroa, que creemos que se puede dar. Es importante seguir en la Diputación de Gipuzkoa para continuar como hasta ahora aportando soluciones a las personas. Y como no, está también la situación en Araba, donde habrá una pelea importante.
¿Podemos será un enemigo?
-No le consideramos enemigo. Creemos que su irrupción puede venir bien para regenerar el Estado español e impulsar la ruptura democrática. Además, si reconoce el derecho a decidir y reconoce el derecho de Euskal Herria, insisto: bienvenido sea.
Pero, ¿puede restar votos a EH Bildu si presenta candidatura para las instituciones forales?
-Repito, no les consideramos enemigos. Si a nosotros nos va a quitar algunos votos, quitará muchos más a otros partidos que no reconocen el derecho a decidir como PSOE y PP. No nos vamos a pelear por unos votos. Es un partido que está encauzando el enfado que existe en el Estado español.
Han mantenido una reunión con el consejero Gatzagaetxebarria. ¿Hay posibilidad de que EH Bildu apruebe las Cuentas de Urkullu?
-Vamos a intentar que cambien de orientación. Tal como están planteadas van a consolidar los recortes y nosotros trataremos de llegar a acuerdos que permitan cambiar prioridades. Creemos que hay una merma importante en el sistema público. Hay 968 millones que se destinan para pagar la deuda, es decir, 968 millones menos para Educación, Sanidad o Servicios Sociales. Hay una bajada del 40% en las ayudas de conciliación y del 33% en ayudas de emergencia. Hay que llegar a acuerdos para atender las necesidades de las personas.
Andoni Ortuzar señaló que su propuesta se parece a una “carta al Olentzero” y les pregunta de dónde creen que se puede sacar los millones que aseguran que hacen falta.
-El Gobierno Vasco tiene que elegir entre atender las necesidades de las personas o no. Debe olvidarse de los eslóganes. No estamos pidiendo que haya más dinero, sino que se prioricen unas partidas sobre otras.
Con respecto a Catalunya, ¿veremos a Artur Mas en el banquillo?
-Debemos expresar nuestro total apoyo a la Generalitat y al pueblo catalán. Artur Mas ha estado a la altura de las circunstancias y ha sabido responder a las demandas de la mayoría de la sociedad. Pero con un PP que no conoce el significado de la palabra democracia, que no ha cortado el cordón umbilical con el franquismo, nada se puede hacer. El camino emprendido por Catalunya es el único, el de la unilateralidad. Y en Euskal Herria deberíamos hacer lo mismo. Urkullu debería dejar de perder el tiempo buscando un acuerdo con el Estado español, atender a la demanda mayoritaria del pueblo vasco y trabajar para impulsar el derecho a decidir.
¿Se ha visto Mas condicionado por la sociedad catalana?
-Es verdad que nunca ha sido un independentista fervoroso, pero ahora podía haber dado un paso atrás y no lo ha hecho. En ese sentido hay que reconocerle que ha estado a la altura de las circunstancias y eso es lo que la gente demanda de los políticos.
En el Parlamento Vasco están trabajando en la Ponencia de Autogobierno, donde están todos los grupos. ¿Qué espera de ella?
-Ojalá impulse el derecho a decidir que corresponde a Euskal Herria. Pondremos todo nuestro empeño, pero debemos dejar claro que se trata de una herramienta más que tiene que servir para que se vaya materializando dicho ejercicio trabajando de forma conjunta con la sociedad.
¿No es irresponsable dar pasos a la tremenda?
-No es a la tremenda. Pero no vamos a estar esperando eternamente. Debemos avanzar como pueblo y como sociedad. Y los partidos debemos atender las demandas ciudadanas.
¿La sociedad vasca mantiene un mismo nivel de compromiso que la catalana?
-No estamos a la misma altura. Aún tenemos la mochila del pasado, pero en Catalunya, en poco tiempo, ha florecido el afán independentista