barcelona - El PSC ve cómo su ala soberanista rompe definitivamente amarras y provoca una nueva herida de compleja sutura en el socialismo catalán y, de paso, en Ferraz. La diputada del PSC y exconsellera Marina Geli y los también exconsellers Montserrat Tura y Antoni Castells abandonan el partido para formar otra marca que darán a conocer hoy, fruto de la unión con Nova Esquerra Catalana (NECat), otra formación escindida. La nueva fuerza política surge de la unión entre NECat, que lidera Ernest Margall, y la corriente crítica Moviment Catalunya, que agrupa a los citados exconselllers y dirigentes históricos del PSC. Geli, que mantendrá su escaño al menos hasta enero, justificó este paso porque “representamos al socialismo soberanista” que defiende la celebración de una consulta que permita a los catalanes ejercer su derecho a decidir. Tanto ella como Núria Ventura, la otra diputada que forma parte de Moviment Catalunya y que también se marcha del PSC, aseguraron seguir siendo fieles al programa electoral con el que el PSC concurrió a las elecciones de 2012 y en el que se comprometía con dar la palabra a los catalanes, pero en el actual contexto han llegado a la conclusión de que hay puntos de contradicción entre sus posicionamientos. De momento, el otro movimiento disidente, Avançem, que encabeza Joan Ignasi Elena, no se sumará a esta iniciativa.

Esta situación condujo ayer al histórico dirigente socialista Alfonso Guerra a advertir al PSC de que “competir en la pista de otro es siempre perder”, instándole a dejar de “ponerse de perfil” ante la consulta soberanista que abandera Artur Mas porque, desde su punto de vista, los socialistas catalanes “o cambian de estrategia o de partido”. - I. S.