BARCELONA - Josep Antoni Duran i Lleida tiene intención de seguir como líder de UDC y portavoz de CiU en el Congreso. Así lo afirmó ayer después de la reunión de la Permanente de su partido, en la que negó estar "enterrado políticamente" y dejó claro que la decisión sobre su marcha no es firme. Desterrando especulaciones, precisó que si algún día da el paso, será él mismo el que hable claro tras sopesarlo con el president Mas. Sobre sus desavenencias con CDC, Duran admitió que ha meditado dejar su puesto como secretario general de la coalición, pero que no se ha planteado abandonar sus demás cargos en su partido ni en CiU.

Duran aseguró que sus reflexiones "nada tienen que ver" con la decisión de abstenerse hoy en la votación de la ley de abdicación de Juan Carlos de Borbón ni con el proceso soberanista abierto en Catalunya. "Fui yo el que apostó por esta decisión", recordó en relación a la abstención de CiU, recalcando que tanto Unió como él "apoyarán" la consulta por mucho que el Estado "no permita el pacto para que se pueda celebrar".

Lanzó, eso sí, un recado al reprochar que dentro de Convergència se haya hablado más de la cuenta. En este sentido, criticó a Josep Rull, secretario de Organización de CDC, para quien Duran debería "dejar la portavocía en el Congreso" si ya no es el número dos de CiU. Con todo, según el líder democristiano, quien tiene algo que decir al respecto es el president Artur Mas "y no lo ha hecho", zanjó. - Iker Ugarte