Barakaldo - El PSE echó el resto ayer en su feudo de Barakaldo. El teatro de la localidad, lleno a rebosar en el estertor de la campaña electoral, fue testigo de una imagen inédita en los últimos quince días: Patxi López y Eduardo Madina, dos de los nombres que más suenan para enfrentarse en las primarias del PSOE, se dieron cita en un mitin en el que, de cara a la cita con las urnas del domingo, predominó el mensaje de que la izquierda y la derecha no son "ni de lejos lo mismo", como clamó el secretario general del PSE. Sin embargo fue la denuncia conocida ayer mismo contra el alcalde de Sestao, Josu Bergara, por negar el empadronamiento a unos inmigrantes extranjeros así como el contenido de sus manifestaciones recogidas en una grabación las que alimentaron el mitin socialista.

Eduardo Madina, José Antonio Pastor y el alcalde de Barakaldo, Alfonso García, criticaron al alcalde de Sestao, pero fue López quien lanzó los mensajes más duros. Tras asegurar que "la verdadera mierda es el racismo y la xenofobia", proclamó que los socialistas no quieren "ni la Europa machista de Cañete ni la racista del alcalde de Sestao", momento en el que fue desplegado en un lateral del auditorio una pancarta en las que se podía leer Una Europa sin machismo ni xenofobia. Por todos estos motivos, argumentó, Bergara "no tiene más opción que dimitir", por lo que pidió al PNV que aclare si "comparte" sus palabras o, en caso contrario, exigió que le "echen".

Además de pedir "parar a la derecha", el líder del PSE exhortó a "frenar a los nacionalismos egoístas que quieren trocear de nuevo Europa" y aseguró que el lehendakari Urkullu se preocupa más del nuevo estatus o el soberanismo que de los desempleados. López enfilaba así la recta final de su campaña, en la que apenas ha aparecido por Euskadi, en un acto en el que ni él ni Madina aludieron a las primarias socialistas.

Por su lado, este último llamó a afrontar en las urnas "una batalla épica en España y Europa" contra la derecha, que les dé "un susto" y que anticipe el fin del Gobierno de Rajoy.