Bilbao - La presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), Garbiñe Biurrun, apremió ayer a ETA a que adelante lo antes posible su final para evitar que el proceso de paz se complique todavía más, dado que episodios como el suscitado este pasado fin de semana con la citación por parte de la Audiencia Nacional a los miembros de la Comisión Internacional de Verificación (CIV) hacen que "se esté enredando".
En declaraciones efectuadas a Euskadi Irratia, la jueza, miembro de la Comisión para el Impulso del Proceso de Paz auspiciada por el Foro Social, aseguró que aunque ETA diera por acabada su actividad con la declaración del 20 de octubre de 2011, "aún quedan muchos cabos sueltos", por lo que reclamó a la organización armada que acelere los pasos que desemboquen en su final. "Uno de ellos es su desarme, y otro anular todas sus estructuras militares. Eso se debe hacer cuanto antes, porque la sociedad vasca quiere que ese final se materialice cuanto antes y porque las cosas se están enredando", incidió.
Biurrun, quien anunció que su grupo también se reunirá con víctimas, aludió a obstáculos en el proceso, como la citación del juez Ismael Moreno a los verificadores. Para ella, se trató de un hecho extraño "en la medida que ellos mismos han dicho que no les ha ocurrido nunca en ninguna parte"; aunque por otro lado, en su calidad de jueza, consideró que era comprensible la decisión adoptada por los magistrados de la Audiencia Nacional en tanto en cuanto dos de los miembros de la CIV, Ram Manikkalingam y Ronnie Kasrils, aparecían en un vídeo con dos miembros de ETA, por lo que de alguna manera era pertinente la citación.
Para Biurrun, sin embargo, estos hechos dificultan la actuación de los verificadores, "y si esa Comisión de Verificación desapareciese, las cosas se volverían mucho más difíciles, también para ETA", de ahí su llamamiento a la banda.
