Bilbao. El Partido Popular no se ha dado por enterado del fin definitivo de la violencia decretado por ETA en octubre de 2011 y está realizando "la misma política" que antes de esa fecha. Como consecuencia de dicha postura eminentemente pasiva, el Gobierno liderado por Mariano Rajoy se ha visto superado en los últimos meses por acontecimientos como la derogación de la doctrina Parot o el reciente comunicado del colectivo de presos de ETA, ante los que ha demostrado no tener prácticamente margen de maniobra. "Se están moviendo las cosas", interpretó ayer el portavoz del PNV en el Senado, Jokin Bildarratz, respecto al proceso de paz, por lo que reclamó al Ejecutivo español que "rompa ya esa cerrazón y evolucione positivamente".

Durante el balance del ejercicio 2013 en el Parlamento español que realizaron ayer en Sabin Etxea Bildarratz y el portavoz jeltzale en la Cámara baja, Aitor Esteban, el primero aseveró que la situación es ahora "mucho mejor" que antes del anuncio de ETA del cese de su actividad, lo que hace aún más incomprensible la "parálisis" de La Moncloa, que "no está contribuyendo en nada a la convivencia futura". "Nos la estamos jugando" en materia de convivencia, advirtió, por lo que valoró que "sería imperdonable que, ante un futuro que se avecina mucho mejor y más ilusionante", la formación popular no sea capaz de "llegar a acuerdos en positivo para gestionar esta situación".

En este sentido, Aitor Esteban subrayó la importancia de la reunión que el lehendakari Iñigo Urkullu ha solicitado a Mariano Rajoy para abordar esta cuestión con el objetivo de alcanzar "un acuerdo amplio", y consideró que "no es aceptable en un responsable político" que el presidente español haya dado "la callada por respuesta". Explicó que Urkullu ya avanzó a Rajoy los asuntos a tratar para avanzar en la paz, la convivencia y la situación de los presos, aunque le especificará sus propuestas cuando se celebre el encuentro.

El portavoz del Grupo Vasco en el Congreso dijo esperar que se produzca "una respuesta concreta, aunque sea privada, a los asuntos que las instituciones vascas y el máximo representante puedan plantearle al presidente del Gobierno". "Cuando se hacen propuestas concretas por parte de la Lehendakaritza, el recibir la callada por respuesta no es aceptable", insistió Esteban. Fue el pasado lunes, tras el último Consejo de Gobierno de 2013, cuando Iñigo Urkullu abogó por asumir una postura activa en favor de la paz. En este contexto desveló la solicitud trasladada a Rajoy para mantener un encuentro, petición que sigue sin respuesta.