PARÍS. Ese arsenal, según los cálculos de Hury, incluye 252 de las 400 armas que un comando robó en octubre de 2006 en Vauvert, al este de Francia, pero también 1,3 toneladas de polvo de aluminio, cantidades indeterminadas de otros componentes de explosivos, así como unas 28.000 matrículas y prensas para troquelar que también sustrajo en Francia.
Además, el material electrónico "puntero" que se encontró a Iñaki Domínguez Atxalandabaso al ser detenido cuando entraba en Francia desde Italia el 17 de junio de 2011 mostraba "una voluntad de reforzar su arsenal", ha comentado en el proceso contra los presuntos miembros del aparato de extorsión de la banda Ainhoa Ozaeta, Ekaitz Sirvent y Peio Sánchez Mendaza iniciado el 25 de noviembre.
Según el oficial de la Sdat, desde comienzos de año se tiene noticia de "una decena de vehículos (robados) abandonados" por miembros de ETA en Francia, frente a una treintena de media anual entre 2009 y 2012.
Una prueba suplementaria de que los miembros de la organización que siguen operando en la clandestinidad "no son muy numerosos", en cualquier caso menos de un centenar, ha dicho Hury, que ha citado la cifra de una treintena que se ha publicado en la prensa española, muy lejos de los 500 que había en 2002, de acuerdo con los papeles aprehendidos a la organización.
"Para mantener el arsenal militar no hace falta una armada", ha señalado.
Preguntado por la abogada de la acusación particular, Géraldine Berger-Stenger, sobre el riesgo de radicalización de una parte del colectivo pese a la declaración de alto el fuego definitivo de 2011, ha reconocido que "eso sigue siendo posible" porque algunos presos están descontentos con el fin de la violencia.
Y teniendo en cuenta el arsenal del que disponen, "algunos radicales podrían volver" a la lucha armada, ha añadido el policía.
A su juicio, como "la organización está debilitada militarmente, centra todos sus esfuerzos en la acción política", y ante la amenaza que siente de "verse desbordada por la sociedad vasca" trata de "seguir existiendo" con la emisión de nuevos comunicados.
El comandante antiterrorista ha reiterado que para ETA el discurso de la tregua sólo tiene validez en el territorio español, ya que en Francia "se guarda el derecho de replicar" por ejemplo cuando un miembro de ETA va a ser detenido y también el de aprovisionarse.
En cuanto a la posibilidad de atentar en Francia, ha contado que en el pasado se habían encontrado documentos en donde se percibía la "voluntad" de algunos de hacerlo, pero "la organización no ha querido abrir ese segundo frente".
Y sobre el silencio que mantienen casi todos los detenidos en sus juicios, Hury ha considerado que ETA "es una organización militar, jerárquica, muy estructurada", algo que le ha permitido perdurar pese a los numerosos golpes policiales con detenciones de sus jefes rápidamente sustituidos.
En las cárceles francesas hay actualmente 117 presos de ETA, de acuerdo con las cifras de Hury, que ha recordado que en 2012 fueron detenidos once en territorio francés, a los que se añaden diez desde principios de 2013.