MADRID. La exministra de Vivienda y Defensa y excabeza de cartel del PSC en las últimas generales, Carme Chacón, ha defendido que para solucionar la "crisis" que atraviesa España por las tensiones soberanistas hace falta "una nueva tripulación" que apueste por un proyecto que acabe con el discurso "del miedo y del odio". Esta solución, ha dicho, es el federalismo y el líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, "formará parte de la tripulación que va a enderezar el rumbo".

Así lo ha defendido en un desayuno informativo en el madrileño hotel Ritz, que ha sido su reaparición pública después de que en agosto anunciara que dejaba el escaño en el Congreso para marcharse a dar clases en una universidad en Estados Unidos. La exministra ha decidido volver antes de lo previsto, ya que se la esperaba por primera vez para la Conferencia Política del PSOE que tendrá lugar la primera semana de noviembre, para presentar al líder de los socialistas madrileños en Madrid con una conferencia.

Chacón ha aprovechado los diez minutos de su intervención para dejar clara su posición respecto al conflicto abierto entre Cataluña y el resto de España y para apelar al "diálogo" y la "claridad" en los discursos como forma de solucionar la "relación de enemistad" que, según ha dicho, es ahora mismo la crisis "más urgente y de "mayor gravedad" y que "empieza a afectar de forma peligrosa la convivencia".

"No basta con el diálogo, pero sin el diálogo no hay solución", ha afirmado contundente Chacón, que ha abogado por el proyecto federalista que propone el PSOE para afrontar esta solución y que ha criticado con dureza el separatismo, porque no sólo pretende sacar a Cataluña de España, sino que Cataluña "rompa con una parte de su ser, de su historia y de su cultura", es decir, que se le "ampute una parte de sí mismo".

Por ello, ha defendido la "claridad" y ha recalcado que hay que decir que la independencia no es "posible" ni "deseable", que la ruptura "entrañaría cuantiosos perjuicios sociales y económicos para unos y para otros".

La exministra ha avisado de que al presidente de la Generalitat, Artur Mas, no se le puede "hacer el juego", porque lleva dos años "envuelto en la senyera y hablando de todos los catalanes" cuando no los representa, pero también ha calificado como un error "ignorar el problema" y "cruzarse de brazos".

ESTE AVION TIENE PROBLEMAS DE MOTOR Y FUSELAJE

Así, ha comparado la situación que vive España con la de un avión. Así, ha sostenido que, algunos creen que simplemente se está "atravesando una zona de turbulencias", actúan convencidos de que "los problemas se superan con el paso del tiempo" y por eso su reacción es "aferrarse bien a los mandos" y recomendar que los pasajeros se abrochen los cinturones.

Sin embargo, ella piensa que el avión "tiene problemas de motor, de fuselaje y que necesita pasar cuanto antes por el hangar-taller para someterse a reformas serias". Además, ha recalcado, "necesita también con apremio una tripulación de refresco".

Esta "nueva tripulación" que se necesita, ha dicho, "debe hablar otro lenguaje", porque "es necesario arrinconar cuanto antes el lenguaje del odio y del miedo". "Debe dibujar un proyecto basado en la esperanza y debe hacerlo movilizando emociones, la de avanzar juntos, la de convivir en el respeto de la diferencia, la concordia, la unión y la suma, la razón, la historia compartida, las culturas, las lenguas, los lazos familiares, las amistades, las vivencias comunes entre catalanes y el resto de españoles", ha explicado.

Se trata, ha insistido, de defender "la ilusión de un nuevo proyecto común: el de edificar un país plural y decente, rico en diferencias y comprometido en la igualdad de derechos de todos los ciudadanos". En definitiva, ha dicho, para los socialistas eso se llama "federalismo".

Y de esta nueva tripulación sólo ha precisado un integrante: el líder de los socialistas madrileños. "Sé, y por eso también estoy aquí, que Tomás formará parte de esa nueva tripulación que va a enderezar el rumbo", ha dicho.

El dirigente madrileño, que también ha centrado una parte importante de su discurso en hablar las relaciones entre Cataluña y España, ha defendido por su parte el papel que juega Chacón en esta situación como símbolo de "unidad". Así, ha avisado a aquellos, incluso dentro de su partido, pretenden hacerla elegir "*bando", que si lo hiciera "ya no serviría para encarnar la unidad" que, ha dicho, encarnan los socialistas.

En la sala, les han escuchado el secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y en representación de la Ejecutiva del partido los secretarios de Formación, Rafael Simancas, e Igualdad, Purificación Causapié. También ha asistido el diputado y exministro Ramón José Blanco.

LAS IDEAS, LAZO DE UNION MAS PODEROSO QUE LA GEOGRAFIA

Chacón ha comenzado su intervención defendiendo que las ideas son un "lazo de unión más poderoso que la geografía o la partida de nacimiento" y ha lanzado duras críticas a aquellos que "llevan incubando desde hace tiempo" la relación de enemistad entre Cataluña y el resto de España.

"Todos hemos cometido errores, también nosotros", ha apuntado la exministra, que no obstante ha subrayado que los socialistas, aunque no siempre hayan acertado, "jamás" han incitado al odio ni socavado la convivencia, ni hecho del "enfrentamiento entre españoles" el "eje" de su política.

Chacón ha criticado a quienes un día dijeron que llevar una empresa a Cataluña era sacarla del territorio nacional y después quisieron dar "lecciones de cómo catalanizar España", pero también a quienes desde las instituciones catalanas proponen una visión de la historia "infantil y falaz".

Además, ha lamentado el "error" de "faltarle el respeto" a Mas cuando "representa a la institución" y "caer en el juego de confundirle a él con toda Cataluña cuando no la representa". Así, ha criticado la "equivocación" de "lanzarse al pueril duelo de egos y disputas protocolarias".

Por eso, ha celebrado como "un gesto de cordura y como un paso positivo" la visita del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el líder del PSC, Pere Navarro, a Barcelona de este viernes par presentar al presidente de la Generalitat, el proyecto federalista de los socialistas.

Chacón se ha mostrado convencida de que "a un lado y al otro del Ebro predomina el deseo de convivencia" y la voluntad de apoyo a "un futuro común". Para lograrlo, aunque no hay "recetas infalibles", ha defendido que hay que "ser claros" y "dejar atrás el desafecto". Se trata, ha insistido, de que se acepte la lengua y la cultura catalanas "como deben ser, como propias y no consentidas como una rareza, sino como una riqueza cultural de catalanes y españoles". "Para que el ánimo cambie en Cataluña será necesario que el ánimo cambie en toda España y en particular en Madrid", ha dicho.