Donostia. Con un proceso de pacificación bloqueado a falta de estímulos, el PNV se pronunció favorable a un fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contra la doctrina Parot. Lo hizo ayer su burukide en Gipuzkoa y portavoz parlamentario, Joseba Egibar, al asegurar que una resolución en ese sentido "oxigenaría un ambiente realmente cargado" en el que ni la izquierda abertzale ni el Gobierno español han desoído la demanda de paz de la sociedad vasca.

En un acto en la localidad guipuzcoana de Eskoriatza, los jeltzales valoraron la repercusión que un fallo que en Estrasburgo tumbe la doctrina española -que mantiene en presión a 71 reclusos de ETA- generaría en la siempre turbulenta política vasca. "Confiamos en que sea así para entrar en un nuevo tiempo" remarcó Egibar, ahondando además en que resulta indispensable que "todos", en clara alusión a la izquierda aber-tzale y el Gobierno español del PP, pero también en el resto de agentes políticos, den un empujón a la consolidación definitiva de un escenario de convivencia plena en Euskadi.

Dos fueron los destinatarios de sus mensajes del presidente del Gipuzko Buru Batzar: la izquierda abertzale, a la que le falta "valentía política" para realizar una revisión crítica de su pasado y "actualizar su estrategia"; y el Ejecutivo de Rajoy, al que instó a realizar un "cambio radical" en la política penitenciaria para reactivar un proceso que, pese a los cambios de rumbo trazados sigue navegando a la deriva en un mar de dudas.

En este complejo "sobran episodios" protagonizados por el Gobierno español, aseveró el burukide jeltzale en referencia a los macrojuicios contra Segi y las herriko tabernas, y falta fortaleza para "activar, de una vez por todas, la verificación del cese de ETA y su desarme". Enclavados esos movimientos en las "estrategias del pasado" que se han visto como fórmulas fracasadas, consideró "imprescindible adecuar al contexto actual la política penitenciaria", uno de los principales caballos de batalla abierto en el nuevo tiempo sin ETA.

No obstante, y pese a haber trasladado esa necesidad en reiteradas ocasiones al Gobierno de Rajoy, el PNV ha recibido la callada por respuesta de Madrid. Tampoco ha recibido, a juicio de sus responsables, una contestación afirmativa desde una izquierda abertzale instalada en la "inacción" cuando los ambos deberían "dejar de lado sus urgencias y dar un paso al frente, como les reclama la sociedad vasca". Algo que también certificó el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, presente ayer en Eskoriatza.

"Dos años después seguimos esperando noticias de ETA: desarme, reparación, reconocimiento del daño causado.... Y esperamos noticias del Gobierno español, de Rajoy, en materia de política penitenciaria. La paz no es solo ausencia de violencia. Ni Rajoy ni ETA se mueven, no dan pasos", certificó concluyendo que los jeltzales, que pueden "concitar consensos" según afirmaron, se siguen ofreciendo "como puente para traer la paz definitiva a Euskadi".