madrid. El presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Pérez de los Cobos, ha dejado el puesto que ha ocupado durante 15 meses en la comisión de expertos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), toda vez que el artículo 19 de la Ley Orgánica del alto tribunal establece que el cargo de magistrado es incompatible con "el desempeño de actividades profesionales o mercantiles".

Con esta ya son dos las normas del Constitucional que ha incumplido Pérez de los Cobos, después de que saliera a la luz que fue militante del PP hasta el año 2012, cuando ya ejercía como magistrado del alto tribunal -sería nombrado presidente poco tiempo después-, cuando el reglamento del mismo también prohíbe de forma taxativa a sus miembros militar en un partido político. Ahora es el puesto que mantenía hasta la fecha en el OIT el que hace que vuelvan a surgir dudas sobre si es la persona más adecuada para ejercer la presidencia del organismo judicial.

Al parecer, Francisco Pérez de los Cobos alegó haber recibido una autorización verbal del anterior presidente del Constitucional, Pascual Sala, para mantener su puesto en el tribunal mientras ejercía como asesor en la Comisión de Expertos en Aplicación de Convenios y Recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo. El magistrado no presentó su dimisión en la OIT hasta días después de ser elegido presidente del TC por unanimidad, por lo que compatibilizó ambos cargos durante ese periodo. Según adelantaba ayer El País, Pérez de los Cobos no pudo acudir a resoluciones del Constitucional en noviembre de 2012 -cuando todavía no era presidente- porque estaba presente en al menos dos reuniones del OIT.

Por participar en dichos encuentros recibió las mismas dietas que el resto de los miembros de la Comisión de Expertos. Ésta se encarga de evaluar técnicamente la aplicación de las diferentes normas internacionales en los Estados miembros de la OIT, entre los que se encuentra el Estado español.