Los socialistas tensan su relación con Bildu con una moción de reprobación
registran un texto contra el diputado de innovación por no activar el plan de reactivación de las cuentas
donostia. Bildu vive sus horas más complicadas al frente de la Diputación de Gipuzkoa. A las críticas de la oposición contra el sistema de recogida de residuos puerta a puerta, a las consultas ciudadanas en su contra, a la decisión de la Fiscalía de poner la lupa en la cancelación de las obras de la incineradora, y a la ruptura de relaciones con Adegi, se suma ahora el alejamiento de un PSE desconcertado por el incumplimiento del pacto presupuestario suscrito con el equipo de Martín Garitano. Si la coalición abertzale ya se enfrentó a las críticas del PNV el pasado año precisamente por incumplir el pacto que permitió a la Diputación contar con unas Cuentas para 2012, la institución foral ha soliviantado en esta ocasión a los socialistas al descafeinar el plan de reactivación fijado como contrapartida para facilitar la aprobación de los Presupuestos de 2013. El PSE registró ayer por la mañana una moción de reprobación del diputado de Innovación, Desarrollo Rural y Turismo, Jon Peli Uriguen, por no haber aprobado aún los decretos que desarrollan el plan, mientras Eusko Alkartasuna rehusó hacer autocrítica y atribuyó su andanada a la negociación de un pacto global con el PNV que obligaría al PSE a distanciarse de Bildu.
El secretario general del PSE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola, explicó ayer en un comunicado que la iniciativa del plan anticrisis fue introducida por el PSE en los Presupuestos de 2013 a través de una partida que ascendía a 7,6 millones de euros. El socialista aseguró que la Diputación "no cumple con su palabra" y, mediante esa reprobación, que será debatida en septiembre, pretende manifestar su "más absoluta disconformidad con la gestión que está llevando a cabo el equipo de gobierno de la Diputación en relación con la ejecución de la partida destinada a iniciativas que sirvan para luchar contra la recesión y el paro".
El responsable de Política Institucional y miembro de la Ejecutiva Nacional de EA, Unai Ziarreta, por su parte, quiso trasladar su apoyo a Uriguen, y quiso rebatir al PSE recordando que el diputado foral "está gestionado este año un presupuesto pactado con el PSE en gran medida". Además, trató de desembarazarse de cualquier acusación de deslealtad matizando que Bildu mantiene informados "al día" a los socialistas. Por ello, interpretó que la iniciativa del PSE "no tiene nada que ver" con los programas de la Diputación, "sino con intereses políticos" que pasarían por "ir preparando el terreno al pacto con el PNV" a costa del "alejamiento" de EH Bildu.
El incumplimiento del pacto podría dejar a Bildu sin apoyos para aprobar las reformas fiscales en cartera -entre ellas, la del Impuesto de Sociedades, clave para una formación de izquierdas-. De todas formas, si PNV y PSE forjaran su pacto fiscal, cabría imaginar que los socialistas se negarían a apoyar cambios que contradijeran el espíritu de ese acuerdo. Aun así, jeltzales y socialistas necesitan, al menos, el respaldo de PP o Bildu para aprobar sus reformas en Juntas, así que sería precipitado colegir que quedaría fuera de juego tras un acuerdo entre PNV y PSE.
Jon Peli Uriguen. Foto: efe
"El socialismo está preparando el terreno
al pacto con el PNV alejándose de EH Bildu"
UNAI ZIARRETA
Miembro de la Ejecutiva de EA