Donostia. Sentada en el espartano despacho que ocupó en su día María San Gil, la nueva presidenta del PP vasco conjuga firmeza en la demanda de compromiso ético al mundo abertzale con la visión de que su partido debe .
¿Pondría la mano en el fuego por Rajoy, por que no cobró sobresueldos del PP siendo ministro?
Eso de poner la mano en el fuego... Sé que Rajoy es una persona honesta. Para que yo esté en política he necesitado saber que las personas que nos dirigían eran honestas, porque cuando te metes en un lío de estos sabiendo que estás comprometiendo tu vida podrán acertar más o menos en sus decisiones, te podrán gustar más a o menos, pero que sean personas honestas es fundamental.
¿El PP y Mariano Rajoy están dando suficientes explicaciones en el 'caso Bárcenas'?
Entiendo y respaldo que Mariano Rajoy esté ocupado en sacar a España de la crisis y todas sus actuaciones van dirigidas, también en este caso, a mantener una imagen de España, que ahora es fundamental. A los dirigentes del PP les toca solucionar esto para que Mariano Rajoy pueda dedicarse a lo que se tiene que dedicar. Seguramente en la gestión de todo esto ha habido momentos en los que se ha acertado más y en los que se ha acertado menos. Me cuesta mucho juzgar si se ha hecho bien o no porque es una situación muy complicada cuando una persona de la máxima confianza como el señor Bárcenas te sale con todo esto. Al partido le ha costado reaccionar. Primero decía que no puede ser pero luego ha visto que sí podía ser. Gestionar todo esto es muy complicado pero hay que conjugarlo con la claridad. Los ciudadanos la demandan. Tiene que haber un antes y un después en el PP tras Bárcenas. Espero que a nivel judicial se tomen decisiones cuanto antes pero después el PP tiene que hacer su recorrido.
¿Qué recorrido es ese?
Tiene que recuperar la confianza de los militantes y votantes con hechos y actitudes.
¿Es necesario cambiar el aparato directivo del PP?
Estoy segura de que aquellos que están dirigiendo el PP estarán en ello y lo tendrán en la cabeza. Otra cosa es que las cosas se deben hacer cuando se pueden hacer y en este momento son los jueces los que tienen que hablar. Cuando los jueces hablen será el momento de tomar decisiones en el PP.
¿El 'caso Bárcenas' puede hacer caer el Gobierno de Rajoy?
Estoy segura de que no. No, porque el problema está ahora mismo en la credibilidad de la marca PP y hay que trabajar en eso.
¿Qué opina de las declaraciones de Esperanza Aguirre, siempre dispuesta a hacerle la cama a Rajoy?
Mis declaraciones no tienen nada que ver con las de Aguirre. Cuando dije que los militantes del PP estaban asqueados con el caso Bárcenas lo hice desde la más absoluta lealtad.
¿Así que Aguirre es desleal?
No. Lo que digo es que yo estoy dentro del PP y mis palabras tienen que ser de denuncia y de azuzar conciencias, pero desde la lealtad.
¿Convocará un congreso para ratificar su designación como presidenta del PP del País Vasco?
Sí, pero todavía no sé la fecha. La primera interesada soy yo, pero no porque no me sienta legitimada. Todo lo contrario. Veo un PP del País Vasco que viene detrás en bloque. Pero creo que es bueno hacer ese congreso porque es un ejercicio de democracia interna. Estamos de acuerdo que la mejor circunstancia para llegar a la presidencia es mediante un congreso pero a mí me tocó la circunstancias de la dimisión de Antonio Basagoiti, que había que solucionar de la manera que se consideró más apropiada.
¿Introducirá cambios en la dirección del partido?
Con independencia de que pueda reubicar a ciertas personas de una u otra manera, asumo el equipo con el que estoy trabajando.
¿Se ha puesto una fecha límite para permanecer en la presidencia del PP?
No me atrevo a poner topes a nada, porque yo hace unos meses estaba pensando en tener a mi quinto hijo, quería aprovechar para hacer algún tipo de reciclaje, lo tenía planificado y nada ha sido posible. He aprendido una cosa, la de no hacer planes. Soy muy de pedalear en el día a día y ver hasta donde llegas. Mi compromiso está ahora al cien por cien con el partido y estoy muy ilusionada. Me ha tocado seguir el periodo de transición que abrió Antonio Basagoiti. El PP era valorado fundamentalmente por su resistencia y fortaleza ante ETA. Ahora, en un escenario sin ETA el PP se tiene que reinventar y dejar claro que nosotros también tenemos un proyecto que ofrecer a Euskadi, un proyecto de centro. Tengo la intención de demostrar con hechos que nosotros podemos ser útiles.
¿Adopta la idea de Basagoiti de abrir 'PPtokis'?
Creo que se refería más bien a que vamos a estar en todo Euskadi y contar lo que somos con mucha mayor libertad. No es tanto abrir locales porque no tenemos dinero. Habrá gente que diga que cómo puedo decir esto con toda la pasta que está saliendo... Pero veo nuestro presupuesto y da para lo que da. Tenemos que bajarnos del tacón y patearnos Euskadi, que ahora podemos.
¿Percibe el PP vasco que le es más fácil llegar a la gente tras ETA?
Es que todo ha cambiado. Cada vez que voy a Madrid les digo que tienen que venir a Euskadi y ver cómo ha cambiado todo. La sociedad vasca ha pasado página pero no en el mal sentido, sino en la necesidad vital de vivir en una sociedad sin tensión. Eso no significa que no se recuerde la verdad, los cuarenta años de terrorismo, o que la sociedad vasca se haya olvidado de Miguel Ángel Blanco. No. Significa que la vida sigue y lo que nos toca es gestionar esta nueva situación.
¿Y en lo personal?
Un cambio absoluto. Mi día a día se ha relajado. Lo que me puede pasar ahora es que una señora me pare y me cante las cuarenta por otra cosa. Vivo en Hondarribia y llevo allí a mis hijos a entrenar. Gente que está alrededor probablemente sea de Bildu y no pasa nada. Ahí te das cuenta de que la sociedad vasca no soportaría una vuelta atrás de la violencia. Eso es la normalidad y para eso no necesitamos ningún plan de paz.
¿Es para el PP una condición sine qua non que la izquierda abertzale acepte el suelo ético para entrar en la Ponencia de Paz y Convivencia?
Sí, porque tiene aspectos tan básicos como la deslegitimación del terrorismo. No estamos de acuerdo en todos los párrafos, pero ahí está la virtud, porque fue un gran esfuerzo que hicimos todos y para nosotros mismos fue un recorrido. Vamos a tratar de que el PNV y el PSE se sumen a esa exigencia a la izquierda abertzale de que venga a ese acuerdo.
El lehendakari Urkullu afirmaba en DNA que Rajoy debería ver que es tiempo de hablar de convivencia y no tanto de política antiterrorista. ¿Lo comparte?
No debería ser incompatible. Si hay personas que ha delinquido, han de ser detenidas y puestas a disposición judicial. No debería ser incompatible con que haya iniciativas como el Plan de Paz o con el hecho de que las víctimas vayan a las escuelas a contar su testimonio. Pero sin olvidar, sin pasar página como pretende trasladar el Plan de Paz, de que estamos en una situación parecida al Ulster, de que aquí hay dos bandos y que o todos somos buenos o somos malos.
¿Si los presos de ETA apuestan por la reinserción individualizada sería un signo suficiente para el PP?
Sería un paso. Reconocer que son presos comunes, en el sentido de que se les aplica la misma ley que al resto de los presos, ya sería admitir que no son un colectivo, fruto de un conflicto político. Sinceramente, ahora mismo no lo veo. Creo que están lanzando globos sonda para hacer ver que tienen la intención de moverse y, mientras tanto, juegan a decir que es el Gobierno de España el que tiene que dar todos los pasos. A los presos les han contado que algo se va a mover y van a salir. Y se dan cuenta de que no, que eso no va a ser así. Imagino por tanto que la presión será muy fuerte hacia la izquierda abertzale que está sentada en el Parlamento.
¿Qué le parece que la Fiscalía de la Audiencia Nacional cuestione los informes médicos sobre el preso Uribetxebarria y pida "recalcular" su esperanza de vida?
Realmente no sé a qué obedece esa petición de información. Hasta lo que yo sé esa persona está muy enferma y se morirá cuando se tenga que morir. Creo que una sociedad que tiene principios humanitarios es una sociedad mejor y, si esta persona está en una situación desahuciada, que vaya a su casa a morir. La humanidad que este señor no ha tenido sí la tiene la sociedad. No soy capaz de desear la muerte a nadie por mucho que haya hecho, aunque entiendo que para las víctimas esto es muy duro y veo muy humano que haya personas que puedan desear su muerte. Pero los que estamos en puestos de responsabilidad, independientemente de nuestros sentimientos, tenemos que hacer también pedagogía y abogar por una sociedad humanitaria.
¿El PP se siente condicionado por algunas asociaciones de víctimas?
No. Con todo el respeto les escuchamos y siempre tienen las puertas abiertas de nuestra sede, pero el PP debe tener su propio criterio aunque a veces no coincida al cien por cien con las asociaciones de víctimas. Siempre reclamaremos justicia y memoria, y pondremos en valor el papel de las víctimas del terrorismo, pero sería un error tratar de condicionar nuestras actitudes. Somos un partido político que tenemos que ser capaces de aportar soluciones y un futuro, y una Euskadi en paz y en libertad.