BILBAO. La negociación girará sobre las políticas para el impulso de la economía y lucha contra el paro, la reforma del entramado institucional y de las sociedades públicas, el compromiso para la sostenibilidad de los servicios públicos y la reforma fiscal y el plan de lucha contra el fraude.
"El objeto de dicha reunión es acordar una visión de conjunto de las cuestiones puestas sobre la mesa y definir la metodología y el calendario de las negociaciones bilaterales que mantendrán grupos de trabajo de ambos partidos", explican PNV y PSE-EE.
La primera reunión se celebrará en el Parlamento vasco y la delegación del PNV que acudirá está integrada por cuatro de los más destacados miembros del Euzkadi Buru Batzar (EBB): Joseba Aurrekoetxea, Joseba Egibar, Pilar García de Salazar y Koldo Mediavilla.
La del PSE-EE estará integrada por Rodolfo Ares, Idoia Mendia y los tres secretarios provinciales, José Antonio Pastor, Txarli Prieto e Iñaki Arriola.
En ninguna de ellas figuran los máximos responsables, Andoni Ortuzar (PNV) y Patxi López (PSE-EE), aunque los socialistas dijeron que López se incorporará "cuando sea necesario".
Estas negociaciones son diferentes a las que el PNV ha iniciado con el resto de los partidos para acordar una reforma de la fiscalidad y un plan de lucha contra el fraude tributario.
En esa ronda ya se ha celebrado un encuentro, el pasado martes con el PP, y la delegación del PNV, de menor nivel, estuvo integrada por Pilar García de Salazar y el diputado vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga.
Ahora con el anuncio de esta reunión, el PNV también asume dos de los planteamientos hechos por los socialistas: el que la negociación sea bilateral y que se aborden esas cuatro grandes cuestiones de forma "global" y no por separado.
El PNV gobierna en Euskadi en minoría, con 27 de los 75 parlamentarios, y la falta de apoyos ya le ha obligado a tener que retirar el proyecto de presupuestos para este año.
Para alcanzar la mayoría absoluta el PNV necesitaría pactar con EH Bildu o con el PSE-EE, o bien simultáneamente con el PP y UPyD.
Este "gran acuerdo de país" con los socialistas, aunque no suponga una coalición de gobierno ni un pacto de estabilidad parlamentaria, permitiría al Gobierno Vasco de Urkullu sacar adelante sus Presupuestos y toda la política económica, que ha establecido como su prioridad para esta legislatura.