PALMA.El juez que instruye el caso Nóos, José Castro, ha dictado una providencia en la que pide a las acusaciones que se pronuncien sobre "las líneas de investigación insinuadas por la Audiencia Provincial".
Además de la Fiscalía, tienen que pronunciarse las abogacías del Estado y de la Comunidad Autónoma, el PP de Baleares, los concejales del PSOE del Ayuntamiento de Valencia así como Manos Limpias. Castro apunta que, una vez tenga los pronunciamientos de todas las partes, decidirá cual es la postura que toma acerca del asunto y si pide un informe ampliatorio sobre la infanta Cristina a la agencia tributaria. Las acusaciones tienen cinco días de plazo para decidir sobre el tema. La Audiencia de Palma ha dejado las puertas abiertas a la posible imputación de la infanta por supuestos delitos fiscales y blanqueo de capitales.
El juez, mientras tanto, prosigue con la investigación de los negocios privados de Iñaki Urdangarin. Por eso, ha citado para el próximo diez de junio a tres presuntos testaferros del Duque de Palma relacionados con la trama de evasión de dinero a paraísos fiscales. Se trata del que fuera apoderado de Urdangarin, Mario Sorribas, de su amigo y comisionista, Alex Sánchez Mollinger y del hombre de paja Robert Cockx. Sorribas y Cockx tendrán que comparecer como imputados, mientras Mollinger lo hará como testigo.
En esta providencia, el juez no ha puesto plazo de tiempo al exsocio de Urdangarin, Diego Torres, para que entregue los correos electrónicos que tiene en su poder. La Audiencia de Palma, en el auto del martes, pidió a Castro que conminara a Torres a entregar los correos.