madrid. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró ayer que es contrario a la aplicación del euro por receta, que pretende imponer el Gobierno de la Comunidad de Madrid a partir del 2013 y que ya se cobra en Cataluña desde el pasado mes de junio, y anunció que negociará con ambas CCAA su supresión antes de recurrir al Tribunal Constitucional. "A mi no me gusta el euro por receta", afirmaba tajante en una entrevista radiofónica, en la que aclaró que esta medida "rompe con el sistema equitativo e igualitario que pretende el Ejecutivo, ya que en estas dos comunidades el paciente paga dos veces por un mismo medicamento". "Quiero un sistema sanitario en el que todo el mundo sea tratado igual. Hemos tomado la decisión, de acuerdo con todas las CCAA, de que todo el mundo pague en farmacia una pequeña cantidad porque es un ahorro para el contribuyente", explicó.

No obstante, insistió en que antes de recurrir ante el Tribunal Constitucional este copago "tengo la esperanza de llegar a un acuerdo" con Madrid y Cataluña.