Bilbao. Los más veteranos recordaban aquella celebración de Herri Batasuna en las elecciones municipales de 1979. Lo cierto es que La Casilla, donde EH Bildu congregó a sus simpatizantes, vivió ayer la fiesta al tran tran. Los primeros sondeos, en los que EH Bildu estaba a la zaga del PNV, a apenas dos escaños, dieron paso a los resultados finales en los que la diferencia entre las dos fuerzas abertzales se cifró en seis parlamentarios.
De este modo, es cierto que se vivieron momentos de alegría porque la izquierda abertzale, principal fuerza dentro de la coalición soberanista, logró lo mejores resultados de su historia, pero los datos obtenidos en Gipuzkoa, donde se esperaba una mayor diferencia con respecto al PNV, pesaban en el ambiente.
A partir de las ocho de la tarde, la misma hora en la que se cerraban los colegios electorales, la presencia más nutrida en el vetusto pabellón vizcaino era la de los periodistas. Más de medio centenar de medios acreditados, entre ellos la emisora japonesa NHK o France Press. Dentro de los vestuarios, habilitados como centro neurálgico de operaciones, Laura Mintegi cotejaba los datos que ofrecía el Gobierno vasco. Con ella, destacados dirigentes de la izquierda abertzale como Rufi Etxeberria o Joseba Permach; el secretario general de EA, Pello Urizar o Dani Maeztu, de Aralar.
Mientras el grupo Akerbeltz amenizaba a los dos centenares de seguidores que se acercaron a La Casilla, Maribi Ugarteburu, Marian Beitialarrangotia y Oskar Matute eran los encargados de atender a los medios de comunicación, especialmente a las radios. Aunque nadie quería hacer una valoración más pormenorizada hasta que estuviera escrutado el cien por cien de los votos, en el ambiente se palpaba el hecho de que en Gipuzkoa, feudo de Bildu y Amaiur en los últimos comicios -municipales y generales-, el PNV se había acercado hasta el punto de igualar en número de escaños. Y desde Gipuzkoa, precisamente, llegó el diputado general, Martín Garitano, que entró en La Casilla a las diez de la noche.
Por fin, a las diez y media, llegó la hora de Laura Mintegi. La cabeza de lista de EH Bildu, que fue recibida con gritos de Independentzia y Euskal Presoak Euskadira, dio las gracias a todos los simpatizantes que "pueblo a pueblo y barrio a barrio" han trabajado a lo largo de la campaña y aseguró que, tal como habían manifestado los parlamentarios de EH Bildu acudirán a la Cámara Vasca con "otra forma" de hacer política.
Los responsables de EH Bildu realizarán hoy una valoración más en profundidad de los resultados.