Vitoria. No todo vale en política, aunque estemos en precampaña. Este es el mensaje que desde la Junta Electoral alavesa han trasladado al alcalde de Vitoria y número dos en la lista del PP por este territorio, Javier Maroto, después de que enviara una carta a los hogares vitorianos para explicar las razones que le han llevado a postularse en los comicios autonómicos. Una misiva que ha recorrido con facilidad los buzones gasteiztarras gracias al control obvio que el máximo responsable de la Administración local ostenta sobre el censo de la capital alavesa y en la que, además, el primer edil incluye una petición "explícita" del voto para su candidatura, según consta en la resolución del presidente del Junta Electoral, Iñigo Madaria, a la que ha tenido acceso este periódico.

A instancias de la denuncia presentada por el PSE, Madaria requiere a Maroto y al PP que cese "de forma inmediata" la campaña de difusión de la carta objeto del recurso y propone a la Junta que él preside la incoación de un expediente sancionador frente al alcalde gasteiztarra. Así las cosas, el abrupto final del reparto postal dará inicio a un periodo de espera para conocer si existe alguna sanción para Maroto y, de ser así, qué cuantía alcanza. Y es que, la vulneración de la Ley Electoral acarrea un castigo que puede incluso llegar a la inhabilitación del dirigente en cuestión para ocupar cargos públicos, pero vistos los precedentes en casos similares el acuerdo anticipado por el presidente de la Junta invita a pensar que el proceso culminará con una sanción económica.

El antecesor de Maroto en el cargo, Patxi Lazcoz, fue el encargado de anunciar ayer la decisión del presidente de la Junta, quien está autorizado por ley a resolver por vía de urgencia y con carácter provisional las consultadas presentadas ante este organismo, sin perjuicio de que esa resolución sea ratificada o modificada por la Junta.

Según consta en la reproducción de la carta que acompaña a estas líneas -una misiva depositada en un sobre blanco sin ningún logotipo político ni señas del remitente-, Maroto se dirige al ciudadano en cuestión para "compartir" las razones que le han llevado a formar parte de la plancha autonómica.

En su último párrafo, el primer edil solicita "como vitoriano" "el apoyo en las próximas elecciones vascas del 21 de octubre", al considerar que "un buen resultado de Partido Popular en Álava redundará en beneficio de todos los vitorianos". Firma la carta como "alcalde de Vitoria-Gasteiz".

Según los fundamentos de derecho en los que el presidente de la Junta Electoral basa su decisión, el artículo 71 de la Ley Electoral prohíbe las "acciones publicitarias" dirigidas a la captación del voto fuera del periodo establecido para la campaña, un ámbito en el que Madaria engloba el "reparto de cartas o folletos bien directamente o por correo".

Alegaciones En la familia popular alavesa no sorprendió la denuncia del PSE, pero sí la decisión del presidente de la Junta alavesa.

Así, además de frenar el reparto de la carta, interpusieron las alegaciones pertinentes para solicitar que sea la Junta Electoral vasca el órgano encargado de dirimir sobre este asunto. Y es que fue este órgano el que hace unas semanas dio el visto bueno a un tríptico de EH Bildu en el que la coalición soberanista demandaba la participación de la ciudadanía en "un proyecto necesariamente colectivo".

Fuentes del PP equiparan esta solicitud con las palabras de Maroto, por lo que consideran que el rasero y las conclusiones deben ser las mismas. Asimismo, estas mismas fuentes negaron la versión socialista y advirtieron de que "en ningún caso se trata de una campaña institucional; en todo caso es una campaña del Partido Popular que se ha pagado con el dinero destinado a la campaña por el Partido Popular", sentenciaron.

En la bancada opuesta, los socialistas, con Patxi Lazcoz a la cabeza, fueron los encargados de llevar la misiva hasta la Junta Electoral, pero la conformidad de la decisión de este organismo era unánime ayer entre los grupos de la oposición.

Desde Bildu destacaron el "tufo" partidista que desprende la carta de Maroto, mientras que en el PNV señalaron que también habían contemplado la posibilidad de recurrir a la Junta Electoral.